vitoria. Ganar transparencia para recuperar la confianza perdida de los ciudadanos en "el noble ejercicio de la política". Ésa fue una de las principales cuestiones que ayer abordó el Parlamento Vasco, al que PSE, Aralar, EA, IU-Ezker Anitza y UPyD llevaron pactada una proposición no de ley que trataba de atajar una realidad tan tozuda como preocupante.

La propuesta constaba de cuatro puntos fundamentalmente referidos a acabar "con la sombra de la sospecha" que pende sobre el patrimonio de los cargos públicos.

El primero de ellos, el que indicaba que todos los cargos públicos deberán realizar en el momento de acceso al puesto una declaración de bienes que quedará en el registro oficial de la institución correspondiente, y por lo tanto será de acceso abierto a quien por ella se interese, salió aprobado por unanimidad.

Sin embargo, PNV y PP hicieron valer la mayoría que suman para frenar la aprobación de los tres restantes arguyendo principalmente razones técnicas, ya que en el fondo dijeron compartir la apuesta por ganar espacios para la transparencia.

El PP subrayó que la vía legislativa elegida no había sido la correcta y que se planteaban algunos excesos competenciales, mientras el PNV, en la misma linea, se centró en pedir al Gabinete López que presente en la Cámara el prometido Proyecto de Ley del Régimen de Incompatibilidades de miembros del Gobierno y altos cargos. Así,, aunque el PSE le tendió la mano aceptando hacerlo en julio, las tornas no cambiaron y la votación relegó al cajón las otras tres iniciativas. Entre ellas, las que defendían auditar la evolución del patrimonio de los cargos para ver si "se corresponde" con sus ingresos y reforzar la garantía de limpieza de las contrataciones públicas.