MADRID. La Audiencia Nacional ha absuelto a Jesús María Martín Hernando, 'Txus', que se enfrentaba a una petición fiscal de 39 años de cárcel por participar en el asesinato del agente de la Guardia Civil José Manuel García Fernández, que fue tiroteado en el bar 'El Puerto' de la localidad vizcaina de Zierbena el 3 de mayo de 1997.

Los magistrados de la Sección Segunda consideran que la declaración de un testigo protegido que se encontraba en el local y que identificó "en un porcentaje muy alto sin estar seguro al cien por cien" a 'Txus' como autor material del disparo, presenta discrepancias con las características físicas del acusado y con el testimonio ofrecido por otros clientes del bar, también presentes en el momento del disparo.

"Existe una importante e irresoluble discrepancia entre las características físicas descritas por el testigo (...) y las descritas con un alto grado de uniformidad por la totalidad de los presentes", indica la resolución que precisa que todos los clientes del bar señalaron a un persona de estatura superior a la media mientras que 'Txus' es "de estatura baja y delgado", perceptiblemente menor al de la media masculina.

La Fiscalía, que atribuía al etarra un delito de terrorismo con resultado de muerte, otro de tenencia ilícita de armas y un tercero de falsificación documental con finalidad terrorista, aportó también como pruebas de su participación en los hechos un post-it en el que figura anotada la matrícula del coche del fallecido y la declaración de un coimputado.

El atentado fue cometido por el 'comando Bizkaia', que estaba formado en el momento de los hechos por el procesado y los fallecidos en un enfrentamiento con la Guardia Civil José Miguel Bustinza Yurrebaso y Gaizka Gaztelumendi Gil. Los autores del asesinato se dirigieron hasta el restaurante 'El Puerto', donde se encontraba el agente y le dispararon en la cabeza y por la espalda, lo que le ocasionó la muerte en el acto.

Los magistrados precisan que los testigos se refieron a que fue una sóla persona la que entró en el bar y apuntan a Bustinza como autor del disparo. Sitúan además a Gaztelumendi en el exterior, al volante del coche de la huida.

En cuanto al hallazgo de la nota en la vivienda que ocupaban Bustinza y Gaztelumendi, la resolución indica que "aporta muy poco en sí misma desde el punto de vista probatorio" porque "ni acredita la relación directa de los liberados del 'Bizkaia' con el acusado, ya que son múltiples las posibilidades a barajar sobre la forma de llegar dicho documento a la indicada vivienda", ni mucho menos que el acusado hubiera compartido con ambos etarras.

El agente García Fernández murió en el acto cuando se encontraba en compañía de su mujer que recordó ante la sala durante el juicio cómo se produjo el asesinato. "A los diez minutos de estar allí, entró una persona bajita, muy menuda, como calvo con el pelo para atrás, buscando a alguien. Sacó una pistola y le dio un tiro en la nuca a mi marido. El bajó la cabeza, mirándome... Y ahí se acabó mi vida y la de él también", relató María Angeles González Cueto entre lágrimas.

La mujer, para la que el fiscal Marcelo de Azcárraga reclamaba una indemnización de medio millón de euros, ha contado que su marido y ella iban al bar 'El Puerto', donde se produjo el atentado, "dos o tres veces por semana, dependiendo de los servicios que tuviera", y que "por seguridad" siempre se ponían "al final de la barra mirando hacia la puerta".

VARIAS CONDENAS

Martín Hernando, que fue acercado a una cárcel del País Vasco en noviembre de 2010 por sufrir un trastorno psicológico, fue condenado a principios de este mes de mayo a 36 años de cárcel por realizar labores de vigilancia del sargento mayor de la Ertaintza Joseba Goikoetxea, asesinado en Bilbao el 22 de noviembre de 1993.

Además, la Justicia francesa le impuso otros tres años por un delito de asociación de malhechores, equivalente al de integración en organización terrorista. El Ministerio del Interior lo trasladó en noviembre de 2011 desde la cárcel de Soto del Real (Madrid) hasta la de Basauri para que fuera sometido a tratamiento psicológico.

El preso de ETA fue detenido en 2002 en Francia y cumple una condena de 12 años de prisión por sus actividades como integrante del 'comando Bizkaia' durante la década de los noventa.