Sevilla. El presidente del PP andaluz, Javier Arenas, anunció ayer que no se presentará a la reelección para este cargo, que ha ejercido durante 14 años, en el congreso regional que se celebrará del 13 al 15 de julio, y aseguró que no tiene "la más mínima intención" de tutelar a su sucesor al frente de la responsabilidad.

El anuncio a la prensa de la renuncia de Arenas a volver a ser candidato a la Presidencia del PP de Andalucía lo ha hecho el secretario general del partido, Antonio Sanz, que unirá su futuro político al de Arenas, quien explicó por carta a los miembros de la Junta Directiva Regional los motivos de su decisión.

Así, anunció que delega "las competencias que se refieren a la coordinación de la política" del partido en el vicepresidente del PP-A y alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido. Arenas aseguró que no tiene "la más mínima intención" de tutelar a su sucesor al frente de esta responsabilidad y añadió que, una vez que ha renunciado a la reelección, hace falta una Presidencia de su partido "con horizonte de futuro".

reflexión Explicó que su decisión es fruto de un proceso de reflexión que se abrió el 25 de marzo, fecha de las elecciones andaluzas en las que el PP se quedó a 5 escaños de la mayoría absoluta y que ha hablado con "mucha gente" en estos dos últimos meses hasta concluir que "hace falta una presidencia con horizonte de futuro". Aun así, Arenas se mostró convencido de que del congreso va a salir un partido "muy fuerte".

"He entendido que era positivo delegar las competencias en una figura de tanto prestigio y tanto predicamento como Juan Ignacio Zoido", señaló Arenas, quién insistió en que lo que le toca ahora es "estar en un segundo plano" después de muchos años "en la vanguardia", que se quedará en Andalucía y que no tiene "ningún horizonte" de regresar a la política nacional. "Tenemos que afrontar nuevos tiempos y nuevos retos", aseguró.