DONOSTIA. "El tiempo de gracia que hemos dado al PP y al Gobierno español se ha acabado ya". El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, mostró ayer su hartazgo por el trato que el Ejecutivo español da a su partido, que no está contando "para nada" con la formación jeltzale en el terreno económico. Ante esta coyuntura, el burukide consideró que el PNV carece de compromisos para apoyar las políticas que lleva a cabo el Gabinete de Mariano Rajoy, unas actuaciones que "encima parecen más improvisación que una política clara de actuación".

Urkullu, en Radio Euskadi, recordó que el PP llegó a Moncloa reclamando a los jeltzales "una actitud responsable, de apoyo, de ayuda", pero que luego "no llama al PNV para nada" y solo "atiende" en materia de pacificación, donde "en algunos casos sí se dan pasos". En este sentido, mostró su sospecha de que PP y PSOE "puedan tener una estrategia de redefinición del modelo de Estado, intentando obviar la representación de los nacionalistas".

El líder jeltzale también valoró lo acaecido durante el Pleno de fiscalidad impulsado por el lehendakari. Así, consideró la cuestión un intento del PSE para distraer la atención de la "incapacidad" que vienen demostrando los socialistas a la hora de hacer frente a la crisis, al tiempo que incidía en la falta de utilidad del debate por carecer la Cámara de competencias en esta materia.

El Pleno del lunes fue también el tema del día para los dos principales líderes de la bancada constitucionalista, pues tanto Patxi López como el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, decidieron actualizar sus blogs versando sobre la misma cuestión. En clave preelectoral, ambos cargaron contra sus adversarios políticos. El objetivo de López fue el PNV, a quien acusó de "denigrar sistemáticamente" la imagen de Euskadi desde que en 2009 abandonaran Lakua. También en las filas del PSE, su secretario de Organización, Alfonso Gil, valoró positivamente el Pleno de fiscalidad, pues permitió oír al PNV "que es necesaria una reforma fiscal tributaria", y "sólo por eso" mereció la pena. Animado por este optimismo, Gil anunció que el PSE llevará esta cuestión a las Juntas de los tres territorios. Basagoiti, por su parte, empleó su blog para cargar precisamente contra el que hasta hace unas semanas era su socio preferente, el PSE, a quien acusó de haber "perdido el norte" por votar, durante el pleno del lunes, a favor de "reclamaciones históricas" del nacionalismo, como "romper la caja única".