Vitoria. El juez del caso Palma Arena, José Castro, confirmó ayer que incorporará a la investigación del Instituto Nóos los correos electrónicos aportados por el exsocio de Iñaki Urdangarin, Diego Torres, que vinculan al rey Juan Carlos y a la infanta Cristina en sus actividades supuestamente ilícitas en 2007, un año después de que oficialmente la Casa Real hubiera ordenado al duque de Palma cesar en su relación de negocios con Torres.
En cuanto al procedimiento judicial en sí, el titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, en el marco específico de la investigación sobre el Instituto Nóos, citó a declarar para mañana y el sábado a un total de 14 nuevos testigos, que se suman a los 28 que ya estaban citados, y entre quienes se encuentra la exconsejera de Sanidad de la Generalitat de Cataluña, Marina Geli. Geli deberá aportar información sobre los 34.375 euros que la Generalitat pagó a Nóos en 2005 por prestar apoyo técnico para el desarrollo de proyectos relacionados con la cooperación sanitaria.
Informe Un informe del Grupo de Delincuencia Económica del Cuerpo Nacional de Policía detalla cómo el Govern catalán, del que entonces la responsable de Sanidad era Geli, solicitó a su asesoría jurídica un informe sobre la propuesta del Instituto Nóos de Estudios Estratégicos de Patrocinio y Mecenazgo para elaborar un proyecto de adaptación de los servicios de salud al fenómeno de la inmigración e impulsar la cooperación sanitaria.
Urdangarin y su mano derecha Diego Torres presentaron a Nóos como una asociación dedicada "al desarrollo profesional y la promoción de organizaciones relacionadas con las ciencias de la salud y de la vida". Entre los objetivos que compartían Nóos y el Departamento de Salud, figuraba el "hallazgo de estrategias que permitieran evaluar las políticas sanitarias, mejorar su coordinación y reducir desigualdades en nuestra sociedad y en los países en vías de desarrollo". Además, coincidían en su voluntad de "promover acciones formativas, de asesoramiento y estudios estratégicos vinculados a la responsabilidad social corporativa y emprendedora".
Nóos logró el contrato, que se firmó el 7 de noviembre de 2005. Para desarrollar este tipo de proyectos, la entidad del duque de Palma ofreció aportar un director -que dedicaría 20 horas semanales-, un codirector -con una dedicación de 40 horas a la semana- y la coordinación del equipo de trabajo. Por su parte, el Departamento de Salud catalán contribuiría con un supervisor, el pago de 34.375 euros y todo el apoyo documental que fuese necesario. El contrato recoge que los proyectos deberían ser entregados, al menos en catalán, de acuerdo con la ley de política lingüística.
