Pamplona. Las calles de Pamplona se vistieron de verde en un Aberri Eguna multitudinario. Miles de personas (12.000 según la Policía y más de 30.000, según los organizadores) respondieron a la convocatoria de la red Independentistak, que tuvo en la reivindicación de la independencia su eje vertebrador y a la que no faltaron algunos de los rostros más conocidos de la izquierda abertzale, Aralar y EA.

"Sí, nos vamos. Nos vamos de España y Francia, donde nunca nos han preguntado si queremos estar. Nos vamos con decisión, con la seguridad de que es lo mejor que podemos hacer, con el convencimiento total de que lo debemos hacer", dijo desde la tribuna del paseo de Sarasate Txutxi Ariznabarreta, encargado de leer el comunicado en euskera, castellano y francés. En él, el portavoz de Independentistak aseguró que "Francia y España arruinan a Euskal Herria". "Arruinan nuestra cultura, nuestra lengua, nuestros recursos naturales y quieren arruinar nuestro futuro", dijo Ariznabarreta, quien destacó que con la independencia "Euskal Herria gana libertad, soberanía, democracia, y gana una república". Por ello, reivindicó "una república vasca, democrática, avanzada, con justicia social, una Euskal Herria solidaria con el resto de naciones del mundo".

Las banderas verdes, con la estrella de ocho puntas, las ikurriñas y banderas navarras pintaron de color ayer el centro de la capital navarra, por donde discurrió una marcha que arrancó frente a los cines Golem y que concluyó ante el monumento a los Fueros. Allí se recrearon por megafonía escenas de la conquista de Navarra en 1512 y del bombardeo de Gernika en 1937. "Nunca más mentiras para ocultar la historia, nunca más negarle a este pueblo el derecho a decidir", tronó Floren Aoiz, antiguo dirigente de Batasuna y ayer encargado, junto a Mailyn Iriart, de presentar el acto final de la marcha.

Minutos antes de arrancar la manifestación, encabezada por una enorme ikurriña, Marivi Ugarteburu, portavoz de la izquierda abertzale, destacó la importancia de un "Aberri Eguna en el que todas las fuerzas independentistas y de izquierdas estén en Pamplona, no solo para pasar un único día sino para demostrar una vocación de trabajo en común bien consolidada". Según explicó, el objetivo de este esfuerzo es "llegar a un escenario de paz y de convivencia democrática entre todas las culturas de este país". "Los independentistas -dijo- tenemos claro que queremos un país soberano, libre y dueño de sus decisiones y de su futuro y el único modo de asegurarlo es a través de la consecución de la independencia".

Por su parte, el secretario general de EA, Pello Urízar, defendió que "el independentismo no solo tiene que ser una opción, sino la única opción que puede garantizar el futuro de Euskal Herria como nación". "Con las medidas de todo tipo que se están dando desde España no podemos garantizar que Euskal Herria sea en el futuro un país, una nación", añadió.

Tras ello, preguntado por el primer Aberri Eguna sin la violencia de ETA, Urízar afirmó que para ellos "ya no está desde antes de este año" porque tenían "claro" que "la decisión política era la importante y se había tomado previamente".

Desde Aralar, el parlamentario Xabier Lasa se mostró en "desacuerdo" con "las políticas económicas" que España y Francia "imponen también a Euskal Herria", que "marginan a los trabajadores y a los desempleados y dejan de lado a las clases más sufrientes, y que sin embargo amnistía fiscalmente a los más poderosos". "Creemos que tenemos que conseguir un estado social, con justicia e igualdad social para todos. Por eso estamos hoy aquí, para reivindicar esa justicia y el camino para la autodeterminación y la independencia", terminó Lasa.