bilbao. El Gobierno Vasco dejó claro ayer que no le ha gustado la batería de reformas anunciadas por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, que propone penas de prisión permanente para quienes cometan delitos que causen "alarma social" o el copago judicial para aquellos que recurran una sentencia en segunda instancia. Tampoco son del gusto del fiscal superior del País Vasco, Juan Calparsoro, que consideró ayer que en el Estado español las penas son ya lo suficientemente "elevadas" como para plantear un cambio de este calado.

En la misma línea, la consejera de Justicia y portavoz del Ejecutivo, Idoia Mendia, recordó que la cadena perpetua no tiene cabida en el actual Código Penal. "Las condenas que tenemos son más elevadas que en el contexto europeo", aseguró. Sobre este debate, la vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) Margarita Uria se mostró "absolutamente contraria" a la entrada en vigor de unas propuestas que suponen "un retroceso en materia de derechos y garantías".

Calparsoro y Mendia. Foto: o. m.