Madrid. El Gobierno del PP convalidó ayer por mayoría absoluta y con el apoyo de CiU y su primer paquete de medidas económicas de esta legislatura, que incluye una subida bianual de impuestos sobre la renta y el capital (6.300 millones más de ingresos), la congelación del salario de los funcionarios y la reducción del gasto de los ministerios en 8.900 millones de euros. El pleno del Congreso aprobó por 197 votos a favor, 138 en contra (PSOE, IU-ICV-CHA, UPyD, PNV, Amaiur, ERC, BNG, CC-NC, Compromís-Equo y Geroa Bai) y 4 abstenciones el Decreto Ley de medidas urgentes para la corrección del déficit público que el Ejecutivo calificó de "ponderado y equilibrado".

El ministro de Hacienda y de Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, reiteró que la subida del IRPF y del IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles) durante dos años es "temporal y excepcional" y pidió sacrificios a los ciudadanos para superar "urgentemente la crisis y empezar a crear empleo". Montoro aseveró que se trata del mayor ajuste presupuestario de la historia de la democracia y recalcó que no recae "ni un ápice" sobre los más débiles.

Además, culpó al anterior gobierno socialista de haber engañado y ocultado a los ciudadanos "un agujero negro de 20.000 millones", los correspondientes a la desviación del déficit público en 2 puntos porcentuales del PIB en 2011. El titular de Hacienda afirmó que conocieron los datos unos días después de llegar al Gobierno, y por medio de los servicios técnicos del Ministerio. No obstante, insistió en que el Ejecutivo "adoptará medidas correctoras en todas las administraciones públicas".

Finalmente Montoro defendió que el Ejecutivo "no ha querido" elevar los impuestos que recaen sobre el consumo (IVA e impuestos indirectos) ni sobre las capas sociales que más han sufrido la crisis, como empresarios y autónomos.

Además y para frenar las críticas por recortes sociales, el responsable de Hacienda destacó que el Decreto ayer convalidado "recoge una subida del 1% para las pensiones en 2012, tras la congelación sufrida en 2011". Añadió además que el Gobierno "se compromete a corregir la pérdida de poder adquisitivo de los pensionistas si la inflación cierra este año por encima del 1%".

Oposición Por su parte, el portavoz socialista, José Antonio Alonso, replicó que el PP conocía y tenía todos los datos acerca de la "senda del ajuste fiscal" antes de las elecciones y le recriminó haber "consumado un engaño objetivo" y haber ocultado las medidas que sabía que iba a adoptar. Además, acusó al Gobierno de hacer una reforma fiscal "injusta, regresiva e ineficiente" y dijo que "ahondará en la recesión y el paro y en el castigo a los asalariados".

También criticó que se incentive de nuevo la burbuja inmobiliaria con el restablecimiento de la desgravación en el IRPF por compra de vivienda habitual.

Por su parte CiU dio su apoyo al texto argumentado "coherencia y rigor económico" ante la profunda crisis económica que sufre España. El portavoz adjunto de este grupo, Josep Sánchez Llibre, precisó que el voto favorable es consecuencia de una decisión de "coraje político", pese a que no comparten la subida del IRPF aprobada por el Gobierno y confía en que sea transitoria.

Por su parte El coordinador de IU, Cayo Lara, criticó que los recortes carguen contra el empleo y ataquen a los servicios públicos.