vitoria. Tras meses de trabajo, ¿cómo llega Egin Dezagun Bidea a la cita de hoy?

Con mucha ilusión y con mucha esperanza de que la sociedad vasca responda. Los datos y el trabajo realizado hasta el momento nos invitan a pensar que estamos a las puertas de unas de las mayores movilizaciones de la historia de Euskal Herria. Las 15.000 adhesiones recabadas, los más de ochenta vídeos realizados en los pueblos, los 300 autobuses que hoy estarán en Bilbao... Ha superado todas las expectativas

¿Están satisfechos con las adhesiones recibidas? ¿Echan de menos a alguien?

Hemos tenido las puertas abiertas para todo el mundo. Respetamos la decisión de quien haya decidido no sumarse a la marcha, nos hemos reunido con algunos de ellos, por ejemplo el PNV o Ezker Batua, pero valoramos muchísimo las adhesiones que hemos recibido. De cara al futuro, no cerramos las puertas a nadie.

¿Qué esperan lograr con la movilización de hoy?

Demostrar que la sociedad vasca considera de forma mayoritaria que la política penitenciara debe de cambiar sus claves actuales de intimidación, represión y venganza a unas claves de solución democrática y ayudar a la resolución del conflicto.

Esta cuestión, la de los presos, ¿es la máxima prioridad de cara a normalizar Euskal Herria?

Es una de las grandes prioridades, y creemos que en la agenda de la sociedad vasca está marcada en rojo.

El nuevo tiempo político nuevo del que hablan en la convocatoria de la marcha, ¿se nota en las cárceles?

Ha habido tímidos cambios en positivo en lo que se refiere al reagrupamiento en algunos módulos, pero en lo que se refiere a las grandes vulneraciones de derechos no ha habido pasos.

La situación sigue igual con Rajoy...

Espero que hoy él y su gobierno sepan leer y entender lo que vamos a decir en Bilbao, y sepa jugar con responsabilidad, con altura de miras, a la hora de construir una solución inclusiva, en la que todos nos sintamos ganadores y en la que se respeten todos los derechos de todas las personas. Una solución definitiva e integral, y entre todos podemos construir un escenario en el que no haya personas presas ni exiliados.

Han acusado al consejero Ares de intentar enrarecer el ambiente.

Consideramos que se ha generado una polémica estéril. Se ha pretendido desvirtuar el contenido de la marcha y que no sea multitudinaria. Por tanto, hemos decidido jugar con absoluta responsabilidad. Será silenciosa, pero ya lo dijo Mario Benedetti: "En ocasiones no hay nada más ensordecedor que el silencio".

¿Las reivindicaciones de la manifestación incluyen al colectivo de presos críticos, agrupados en Langraitz?

Respetamos todas las opiniones, pero actualmente el colectivo de presos y presas políticos vascos sufre unas medidas de excepción que se le aplican de manera especial, específica y generalizada y que no sufren otros presos, ya se consideren presos sociales o políticos.

¿En qué dirección trabajará Egin Dezagun Bidea una vez celebrada la movilización de hoy?

Realizaremos una propuesta a la sociedad vasca en fechas próximas, y ahí concretaremos más detalles. Continuaremos con nuestro trabajo por dar cauce a esta ola que se está generando en favor de los derechos de los presos y de la solución al conflicto que vive Euskal Herria.