vitoria. "Euskal Herria precisa de soberanía plena para que los ciudadanos decidan sobre su modelo de país". Bajo esta premisa se presentó ayer ante los alaveses la candidatura de Amaiur, la coalición soberanista que pretende ser en las Cortes la "garantía" de que se escuche la voz de un pueblo que "quiere ser dueño de su futuro".
Los días vuelan y se suceden vertiginosamente los plazos que desembocarán el próximo 20 de noviembre en las elecciones generales. Amaiur es consciente de que su "terreno de juego natural es Euskal Herria", igual que lo es de que esta convocatoria le coge aún sin cerrar un programa definitivo; dos factores que pueden lastrarle en la carrera electoral ante otras opciones que parten con el aval de la experiencia. Sin embargo, mientras acaba de concreta su oferta, Amaiur ofrece unos "compromisos" desde los que promete basar su actuación y con los que espera poder obtener "la confianza de la sociedad vasca" para impulsar desde Madrid "el cambio político y social" que creen tan necesario como oportuno en el contexto actual. Tanto en lo relativo a la consolidación de un escenario de paz y convivencia normalizada, como en el combate de los efectos de la crisis. "Se dan las condiciones para ello", por lo que Amaiur hará una defensa "férrea" de la "soberanía política, económica, social, cultural, lingüística y ecológica", prometieron.
cuatro compromisos Amaiur pretende que la suma de fuerzas soberanistas se convierta en "el motor" que, aprovechando la "situación histórica" que crea el último comunicado de ETA, impulse la "superación democrática del conflicto político" y la creación de un escenario "sin vulneración de ningún tipo de derecho". Asimismo, situará la defensa de los derechos nacionales como "piedra angular" de su actuación política, teniendo en cuenta, como ayer se preocuparon de subrayar sus representantes mimando especialmente el tensionado caladero navarro, que lo harán sin perder de vista "la realidad política" de esta comunidad.
Pero la coalición es consciente de que, en un contexto de crisis como el actual, su apuesta por "un nuevo modelo social" debe definir su perfil de izquierdas. Y en este sentido, se comprometió a hacer frente a los "brutales recortes" estrechando lazos con otros partidos que estén en su línea, y a exigir un marco vasco de relaciones laborales que dé a los agentes vascos la capacidad de establecer políticas y respuestas propias.