Vitoria. El exdirigente del PNV alavés Aitor Telleria negó ayer ante el juez Roberto Ramos y el fiscal Josu Izaguirre haber cobrado comisiones ilegales a través de la empresa Kataia Consulting, núcleo de la presunta trama corrupta supuestamente liderada por el exdiputado de Administración Local alavés, Alfredo de Miguel.
Telleria y el resto de imputados han sido llamados a declarar de nuevo tras recibir el juzgado un informe de la Unidad de Delitos Económicos de la Ertzaintza según el cual las personas investigadas cobraban comisiones del 4% por facilitar la adjudicación de contratos públicos gracias a su influencia en la administración pública. Ayer se le preguntó a Telleria por unos libros de contabilidad de Kataia en los que figuran, manuscritas, esas referencias al 4%, y el exburukide dijo que él nunca tuvo acceso a los libros de cuentas, según explicó ayer su abogado a DNA.
Telleria sostuvo además que Kataia era una empresa real con trabajos reales, en contra de lo que mantiene el fiscal, quien asegura que se trataba de una firma fantasma constituida para canalizar el blanqueo del dinero procedente de esas supuestas comisiones ilegales y de la firma de contratos falsos con la administración. Al menos en la parte que le toca, Telleria dijo poder justificar cada una de las facturas de la empresa, en la que estuvieron dadas de alta las tres esposas de los principales imputados -De Miguel, Telleria y Koldo Otxandiano, que declara hoy-, y negó que la firma, radicada en sus primeros meses de existencia en una sociedad gastronómica, fuera una empresa pantalla.
El exdirigente del PNV, que también estuvo contratado por Riera, una de las empresas con las que intermedió Kataia, se ofreció a que se investigarán sus cuentas y afirmó que su esposa, Araceli Bajo, también imputada, "siempre ha estado al margen" de la actividad de la firma.
Telleria fue también interrogado sobre la compra de unos terrenos en la localidad vizcaína de Fruiz junto con de Miguel, Otxandiano y otros socios e imputados. El informe de la Ertzaintza que ha reactivado la investigación asegura que varios de los empresarios presuntamente beneficiados por Kataia prestaron dinero sin "garantía real explícita" para la adquisición de los terrenos. Telleria afirmó ayer que la concesión del dinero por parte de Jon Iñaki Etxaburu y Prudencio Hierro, o por parte de una filial de la empresa Riera, se realizó con la dación en pago de los terrenos como garantía, que según Telleria cuando se produjo la operación, en 2008, superaban el valor de las fincas. Según declaró el exburukide, el préstamo se negoció con estos empresarios por la premura con la que debían cerrar la operación, y por ello, con el fin de evitar trámites y papeleos, no se recurrió a ninguna entidad bancaria.
sin actividad En aquel tiempo, cuando se adquirieron los terrenos de la localidad vizcaína, Kataia ya prácticamente no realizaba ninguna actividad empresarial, pero según Telleria no se liquidó precisamente para gestionar esta compra. El antiguo miembro del Araba Buru Batzar está acusado de haber extorsionado a la empresaria bilbaína Ainhoa Alberdi, socia de Etxaburu en Urbanorma Consulting, y a la que tanto Telleria como De Miguel presionaron, supuestamente, para que les pagara 100.000 euros por la adjudicación irregular de la ampliación del Parque Tecnológico de Miñano.
A la declaración de Telleria en sede judicial se sumarán hoy la de Koldo Otxandiano y la de Alfredo de Miguel, que está citado el próximo día 18, y al que se acusa de dirigir las operaciones de Kataia pese a que no formaba parte de la plantilla ni de la directiva de la firma, para la que sí trabajaron su hermana y su esposa.
Por otro lado, el Parlamento Vasco aprobó ayer, con los votos de todos los grupos políticos salvo el del PNV, que se abstuvo, pedir colaboración a la Diputación de Bizkaia. Hasta ahora, la institución se ha negado a entregar documentación sobre empresas y personas relacionadas con el caso Miñano.