lisboa. El ministro de Finanzas de Portugal, Vítor Gaspar, anunció ayer que el país adoptará nuevas "medidas temporales" para asegurar el límite del déficit del país para este año, fijado en un 5,9%, tras la revisión al alza de este indicador en 2010, de un 9,1% a un 9,8%.
En conferencia de prensa, Gaspar descartó más aumentos en la tributación y apenas especificó algunas medidas, entre ellas la venta de patrimonio estatal, la venta de concesiones y la transferencia de fondos de pensiones de la banca.
El ministro de Finanzas compareció para explicar la situación financiera de la región autónoma de Madeira, cuyas deudas ocultas han obligado a una revisión al alza del déficit luso, que en el primer semestre de este año se situó en el 8,1%, aún muy lejos del 5,9 que debe alcanzar para diciembre próximo y cumplir así con el programa de ajustes de su rescate financiero internacional. "Esta situación tendrá que ser corregida con medidas permanentes y estructurales en 2012 y los años siguientes", dijo Gaspar, quien alertó de que "el problema presupuestario" de 2011 no se resume al archipiélago de Madeira, ya que, según dijo, "el 80 % tiene origen diferente". El responsable de Finanzas aseguró que en el primer semestre de 2011, cuando aún gobernaban los socialistas, se consumió "cerca del 70 % del límite anual del déficit".
Respecto a las deudas ocultas del pequeño archipiélago de Madeira, que cuenta con unos 250.000 habitantes, reconoció que "afectaron muy negativamente a la credibilidad" de Portugal, que debe de cumplir con un draconiano plan de ahorro a cambio de un préstamo de 78.000 millones de euros, solicitado el pasado abril.