GASTEIZ. El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3 de Gasteiz ha avalado que se hagan pruebas físicas distintas a hombres y mujeres para acceder a cursos de capacitación dentro de la Ertzaintza, según ha explicado en un comunicado el Departamento vasco de Interior.

La sentencia de este tribunal rechaza un recurso contencioso-administrativo interpuesto por el sindicato SIPE contra la convocatoria del Curso de Capacitación de Escoltas, que fijaba diferentes tipos y baremos para hombres y mujeres en algunas pruebas físicas.

Así, respalda la resolución del 19 de abril del 2010 del Departamento de Interior por la que se convocaba este proceso selectivo y declara ajustada a derecho la base séptima de la convocatoria, la correspondiente a las pruebas físicas.

En concreto, esta base recogía ocho ejercicios físicos diferentes en tipo y en baremos en función del sexo del aspirante a formarse en dicho curso.

El sindicato recurrente consideraba que dicha base vulneraba el principio de igualdad al establecer diferenciaciones en las pruebas en razón del sexo "sin justificación alguna".

La sentencia señala, según Interior, que "lo que no puede discutirse es la diferente naturaleza física entre hombres y mujeres" y recuerda que el Tribunal Constitucional mantiene que es "esa diferencia biológica" la que puede justificar "la disparidad de trato en la calificación de las pruebas físicas necesarias para acceder al curso de capacitación".

Así, defiende que la distinta forma de exigencia se basa tiene la finalidad "legítima y constitucional de impedir que exigir lo mismo sin tener en cuenta dichas diferencias pueda implicar en la práctica la limitación de acceso a dicho curso a las mujeres, en atención a su diferente fuerza física".