Aralar baraja la opción de pedir el voto para Bildu en las próximas elecciones generales

Los malos resultados obtenidos por Aralar en la CAV en los comicios municipales y forales del pasado mayo abrió un periodo de reflexión dentro del partido liderado por Patxi Zabaleta. Bildu, que fue uno de los ganadores de aquellos comicios logró 276.000 votos, por los 37.000 conseguidos por Aralar, quien, además, vio como se quedaba sin representación en las Juntas Generales de Bizkaia y Araba y pasaba de dos apoderados a uno en las Juntas de Gipuzkoa. El triunfo conseguido por la coalición integrada por EA, Alternatiba y la izquierda abertzale oficial incidió de forma directa en Aralar, que, tras conocerse los resultados, reconocía la necesidad de abrir un serio debate para perfilar la línea a seguir en el futuro.

Ahora, de cara a los próximos comicios generales, los presagios en la CAV para Aralar no son nada esperanzadores, lo que ha llevado al partido de la izquierda abertzale a barajar la alternativa de no presentar candidaturas en la CAV y solicitar a sus votantes que otorguen su sufragio a Bildu.

En las dos anteriores elecciones generales, 2004 y 2008, Aralar concurrió en solitario en la CAV, dos comparecencias en las que no logró conseguir representación. En 2004, el partido de la izquierda abertzale sumó un total de 38.560 votos, logrando sus mejores resultados en Gipuzkoa con 22.352 votos. Cuatro años después, en 2008, Aralar bajó en números de votos y logró 29.784, siendo de nuevo Gipuzkoa su mejor feudo al conseguir 17.193 sufragios.

Ante la posibilidad de dar este paso, además de los malos resultados reflejados por las urnas en aquellas elecciones de mayo, en Aralar también se tiene en cuenta que la violencia ejercida por ETA, que fue el elemento clave que le separó de la izquierda abertzale oficial hace diez años, ahora ya no existe. Aunque la organización armada no ha anunciado su final de forma definitiva, tanto desde un lado -Aralar- como del otro -izquierda abertzale tradicional- consideran que la apuesta por las vías exclusivamente pacíficas y democráticas ya no tiene vuelta atrás.

Respeto Desde Bildu aseguraban ayer a este diario que en estos momentos no se mantienen reuniones formales entre la coalición y Aralar, aunque sí recordaban las conversaciones que se llevaron a cabo en Gipuzkoa en vísperas de la designación de Martín Garitano, candidato de Bildu, como diputado general. "Ahora mismo no mantenemos ninguna reunión ni ningún contacto oficial con Aralar. Después de las elecciones sí es cierto que hubo encuentros con la Ejecutiva de Gipuzkoa para tratar sobre el apoyo de Aralar al candidato de Bildu a diputado general, pero después de la configuración de la Diputación de Gipuzkoa no ha habido más contactos", aseguró uno de los portavoces de la coalición soberanista.

Y el motivo de que esa línea entre Bildu y Aralar no esté ahora activada es porque desde la coalición señalan que quieren ser respetuosos con las decisiones que vaya a tomar Aralar. "Tras las elecciones dijeron que iban a abrir un periodo de reflexión y sabemos que a finales de verano van a tener un Congreso. Ellos son los que deben debatir sobre su futuro, pero saben que, de entrada, las puertas de Bildu están abiertas. La intención de la coalición es sumar voluntades soberanistas y todo el que comparta esta aspiración tiene la puerta abierta de Bildu", señalaba.

Lo que tienen claro en Bildu es que las próximas elecciones generales son de vital importancia para la coalición. En una entrevista concedida a DNA por Rafa Larreina, el dirigente de Eusko Alkartasuna aseguraba que la coalición iba a plantear estos comicios como un ensayo para el referéndum de la independencia. "Es importante que en Madrid sean conscientes de la cantidad de independentistas que hay en Euskadi", aseguraba el secretario de Política Territorial del partido liderado por Pello Urizar.

Por parte de Aralar, sin embargo, salvo confirmar que será en octubre cuando se decida el futuro del partido, no se quería ir más allá.

Acercamientos A lo largo del último año se ha ido produciendo el acercamiento de Aralar y la izquierda abertzale oficial, a veces por la vía interpuesta de Bildu, y otras de forma directa. El 25 de septiembre de 2010, Patxi Zabaleta, en nombre de Aralar, suscribía junto a Rufi Etxeberria, de la izquierda abertzale; Oskar Matute, de Alternatiba; Pello Urizar, de Eusko Alkartasuna; y Joseba Garai, por parte de Abertzaleen Batasuna, el denominado Acuerdo de Gernika, en el que se solicitaba tanto a ETA como al Gobierno español que dieran pasos en pro de la normalización política.

Mucho más sintomático fue el acercamiento de Aralar con Bildu en el proceso que desembocó en la elección de Martín Garitano como diputado general de Gipuzkoa. Tras las elecciones, en la ronda de contactos que mantuvo el candidato de Bildu con el resto de formaciones políticas que lograron representación en las Juntas Generales guipuzcoanas, el cabeza de lista de Bildu ofreció a Aralar la posibilidad de compartir responsabilidad de gobierno en el Ejecutivo Foral de Gipuzkoa.

Navarra Si la opción en la CAV sería pedir el voto para Bildu, queda la duda de la decisión que tomará Aralar con respecto a Navarra.

En la comunidad foral, el partido de la izquierda abertzale está integrado en la coalición Nafarroa Bai junto a PNV e independientes. Con respecto a las elecciones de 2007, la coalición pasó de ser la segunda fuerza tras UPN a la tercera plaza superada también por PSN. Si en 2007 logró 77.893 votos, lo que supuso 12 escaños en el Parlamento de Nafarroa, en las elecciones de mayo Nafarroa Bai logró 49.827, que se tradujeron en ocho escaños.

En la perdida de estos votos fue clave la irrupción de Bildu, que logró sumar 42.916 votos, que dieron a la coalición de EA, Alternatiba y la izquierda abertzale siete parlamentarios. Extrapolando los resultados obtenidos en estos comicios forales, Nafarroa Bai lograría mantener el diputado que tienen en estos momentos en el Congreso de los Diputados. Los otros cuatro escaños en juego se repartirían entre UPN, que lograría dos diputados, y el PSN y Bildu que conseguirían un diputado cada uno.