washington. El presidente de EEUU, Barack Obama, afirmó ayer que él y la canciller alemana, Angela Merkel, están de acuerdo en que no se debe permitir que la situación financiera en Europa ponga en peligro la recuperación económica global. El mandatario estadounidense ha añadido que, para evitar que eso suceda, la crisis de la deuda europea debe contenerse ya que, a su juicio, es uno de los factores que provoca la desaceleración de la economía de Estados Unidos. En una rueda de prensa conjunta en Washington tras una reunión de casi dos horas, Merkel aseguró, por su parte, que Alemania quiere mostrar "solidaridad" con sus socios afectados por la crisis en Europa pero que también considera que "es necesario aumentar nuestra competitividad".
El presidente estadounidense, que subrayó que no cree que su país pueda caer en una doble recesión pese a los últimos datos económicos que apuntan a una ralentización en la creación de empleo, expresó su confianza en que Europa podrá hacer frente a la crisis de la deuda griega.
Grecia afronta una situación difícil, en la que ha adoptado pasos significativos para hacer frente a su deuda pero ante la presión de los mercados de capital internacionales requiere la ayuda de otros países de la UE, algo donde "Alemania es un líder clave". "Tengo confianza en que bajo el liderazgo germano, junto con otros protagonistas clave, podremos encontrar un camino para que Grecia vuelva a crecer", ha señalado. EEUU está comprometido "a cooperar plenamente, tanto en el plano bilateral como dentro de las instituciones multilaterales, como el Fondo Monetario Internacional", para resolver la crisis, aseguró el presidente estadounidense. El crecimiento económico de su país, recordó Obama, "depende de una respuesta sensata a esta" crisis. Un "incumplimiento de pagos incontrolado" en la zona euro representaría, a su juicio, "un desastre". Por ello, reiteró, "colaboraremos de manera metódica y prestaremos nuestro apoyo de cualquier manera que podamos". Merkel, que afronta presiones en su país para que no asuma la carga económica del rescate de otros países europeos, subrayó que Alemania "asumirá sus responsabilidades". "Hemos visto que la estabilidad del euro como divisa se verá perjudicada si un país miembro sufre problemas", declaró la canciller, quien agregó que "vemos claramente nuestra responsabilidad europea y afrontamos esa responsabilidad junto al FMI". Alemania quiere mostrar "solidaridad" con sus socios afectados por la crisis.