BILBAO. El portavoz parlamentario del PNV, Joseba Egibar, ha negado "ningún chantaje" por parte de su formación al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, pero ha advertido de que, si en su actual situación, decide impugnar las candidaturas de Bildu, "tendrá que ser responsable de sus decisiones". Por otra parte, ha considerado que la coalición electoral "se escuda" en "un papel de víctima", a su juicio, "un reclamo electoral" que utilizará "hasta el final de la campaña".
Egibar se ha referido a las manifestaciones del consejero de Interior, Rodolfo Ares, quien calificó este viernes de "chantaje" la advertencia de Iñigo Urkullu a Zapatero de que "tendrá muy, muy presente" su impulso a la impugnación de Bildu.
El también presidente del PNV en Gipuzkoa ha negado que su partido haya ni tenga comprometido "ningún apoyo" con el presidente del Gobierno. "A su petición de estabilidad, nosotros le dijimos: 'apuesta también por la estabilidad del país y la estabilidad en el país pasa porque todas las expresiones políticas estén presentes'", ha explicado.
El portavoz nacionalista ha insistido en que su partido no tiene comprometido "ningún apoyo a él" y ha argumentado que "si libremente ha decidido lo que ha decidido, impugnar en su situación agónica y de debilidad, tendrá que ser responsable de sus decisiones".
"Lo mismo que en esta historia, en este pacto, de PSOE y PP hay un interés en ocultar algo que pudiera suceder y es que el partido que dice que manda, el PP sobre el PSOE, si estuvieran todas las expresiones presentes, sería y será la cuarta formación de la CAV y la quinta en Gipuzkoa", ha indicado.
En una entrevista a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Egibar ha expresado su convicción de que las próximas elecciones son "eminentemente políticas", por lo que la formación jeltzale va a insistir en que "hay que dar una respuesta firme y directa".
"El elector tiene una oportunidad para hacer frente a esa estrategia del PSOE y del PP que ofrecen una democracia ajustada a su conveniencia política y que, a diferencia de lo que tenía que haber sido en contraste natural de programas con la marca Sortu o Bildu, no hemos tenido oportunidad de contrastar en ningún momento", ha dicho.
Además, ha considerado que Bildu "se ha escudado" en "esa faceta de ese papel de víctima" por lo que "no necesita presentar ni programa, ni proyecto, lo único que solicita es la solidaridad democrática de quienes entienden que deben estar".
"Nosotros -ha afirmado- no estamos hablando aquí ni de simpatías ni de antipatías, por principio democrático debieran estar, pero se han escudado en esa pose de decir 'nosotros queremos pero no nos dejan'". En su opinión, ése es "un reclamo electoral" que "lo van a utilizar hasta el final de las elecciones o esta campaña electoral".