Pte. de Verdaderos finlandeses

INTELIGENTE, ingenioso y carismático para unos y un xenófobo para otros, Timo Soini ha irrumpido con fuerza en el panorama político finlandés y europeo. Verdaderos Finlandeses una formación que, según Soini, defiende "los valores patrióticos y conservadores", se ha convertido en un partido clave en la futura formación del próximo Gobierno finlandés. Verdaderos Finlandeses se ha colado en el tercer puesto con un discurso antieuropeísta. Durante la campaña, Soini se ha erigido en portavoz de los sectores decepcionados con la política y con la integración europea. Al respecto, el líder ultraderechista apuesta por un tratado de libre comercio sin unión monetaria. Reclama la salida de Finlandia del euro y del Protocolo de Kioto. Al interior del país, le gusta retratarse como un hombre común que hace campaña para mejorar la vida de los trabajadores y pequeños campesinos, pero en su ideario existen también tesis antiinmigrantes por las que ha sido acusado de xenófobo. Aunque no ha hecho de este tema el lema de su campaña, como los ultradereshistas Demócratas Suecos, en su blog describe a los extranjeros como criminales y a los solicitantes de asilo como "bandas de violadores africanos" o "parásitos del dinero de los contribuyentes". Católico devoto, también es contrario al aborto y a los matrimonios entre personas del mismo sexo. Su trayectoria política comenzó a los 17 años. En 1995 Soini fundó junto a otros pequeños partidos la coalición Verdaderos Finlandeses. En 1997 ocupó la presidencia del partido, que ostenta todavía. En las elecciones de 1999, el partido logró solo el 0,99% de los votos. En las elecciones nacionales de 2003 logró ser diputado y en 2009, se presentó a las elecciones al Parlamento Europeo con un discurso euroescéptico y, aunque su partido fue la sexta fuerza, Soini consiguió ser el político más votado.