BILBAO. El presidente del PSE, Jesús Eguiguren, ha asegurado que tras el atentado contra la T-4 de Madrid no se negoció con ETA aunque ha reconocido que sí hubo contactos con los terroristas.

Entrevistado en la "Cadena Ser", el dirigente socialista se ha referido a las actas de la organización terrorista que recogen las conversaciones con el Gobierno durante la última tregua. Preguntado por si adoptó algún compromiso político con la organización armada, Eguiguren ha explicado que hizo una "especie de hoja de ruta" con el dirigente de ETA Josu Ternera, pero ha precisado que "nunca representé al Gobierno español, cuando hablé con ETA". "Además yo era un socialista vasco y establecimos un método que no le debió de gustar demasiado a la dirección de ETA y lo cambiaron", ha dicho.

Eguiguren ha reconocido además que con el atentado de la T-4 se comunicó a los etarras "que se acabó toda la historia", aunque ha advertido que "todavía ni habíamos empezado a negociar". Así ha explicado que si se estuvo "no fue porque se siguió negociando, que es lo que dice todo el mundo, pero tengo autoridad de decirlo porque anduve por allá". "Fuimos porque determinados presidentes de Gobierno de Europa y Gerry Adams transmitieron que ETA tenía algo muy importante que decir y podía cambiar las cosas. Entonces lo que fuimos fue para ir a escuchar lo que tenían que decir y no dijeron nada especial y nos volvimos", ha señalado.

El presidente del PSE ha insistido en que aquel encuentro "no formaba parte de la negociación" y ha instado a distinguir lo que "son contactos, hablar, y lo que es negociación ya que "aquí se está mezclando todo". "Después de la T-4 le aseguro yo que no se negoció, se fue a escuchar lo que nos iban a decir porque de sitios importantes se nos trasmitió que había una oferta muy importante", ha insistito.

Preguntado por las actas de Thierry, el dirigente socialista ha ironizado con que el miembro de ETA "no es Vargas Llosa" y su oficio y especialidad no era la de escribir. Así, ha dicho no reconocerse en esas actas a pesar de estar presente en las reuniones. A su juicio, se trata de "actas hechas para convencer a su gente de que la responsabilidad de la ruptura había sido del Gobierno".

"Por lo tanto, son actas tomadas no por un Nobel de literatura, por lo que cambia la cosa. En segundo lugar son actas revisadas; en tercer lugar son actas preparadas para convencer a su gente y en cuarto lugar, actas en donde sólo recogen lo que les interesa. Porque yo las actas las tengo en la cabeza y sé lo que se dijo allá y lo que no se dijo y de lo que aparece ahí y además fuera de contexto, hubo muy poquito", ha dicho.

CHIVATAZO

Por último, Eguiguren ha explicado que Josu Ternera y los miembros de ETA sabían que a pesar de la tregua declarada las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "andaban detrás de ellos lógicamente". Eguiguren ha señalado además que en la reunión hubo alguna pregunta sobre el chivatazo producido en el bar Faisán aunque "nosotros no fuimos a hablar de eso sino cual era el proceso negociador".

Tras reconocer no "atreverse" a decir todo lo que sabe del chivatazo a la red de extorsión de ETA, ha advertido de que "la policía detiene cuando le conviene detener, no cuando localiza a los terroristas y todos sabemos que ahí había gente que era infiltrada en ETA y uno de ellos en persona me dijo a mi por qué había pasado eso".

De este modo, ha explicado que parece que la operación se paralizó porque había algún infiltrado. "Yo creo que a ETA le hubiera gustado que les hubieran detenido inmediatamente para saber quienes eran y tirar de la cuerda y hubiera habido varios muertos, supongo. Es como funciona la cosa y como aquí hemos visto muchas cosas y sabemos como funciona la lucha antiterrorista estas cosas se hacen así. Lo que pasa es que nunca se van a decir porque un policía serio prefiere ir a la cárcel antes que dar sus fuentes", ha concluido.