madrid. La Audiencia Nacional condenó ayer a 377 años de prisión a los miembros de ETA Asier Arzalluz e Idoia Mendizabal por intentar asesinar a la teniente de alcalde de Portugalete, Esther Cabezudo, en un atentado en el que resultaron heridas otras dieciocho personas.

Así acordó este tribunal en una sentencia en la que también obliga a los terroristas a indemnizar a Cabezudo (PSE) con 155.800 euros, a su escolta Iñaki Torres con 286.200 euros, y al resto de las víctimas con más de 200.000 euros, así como el pago de cerca de un millón de euros por los daños materiales causados.

La sentencia considera probado que Mendizabal y Arzalluz formaban el comando Olaia, que estaba "dotado de armas" y disponía de "importante cantidad de explosivos", además de contar con personas que actuaban como taldes de apoyo, entre los que estaban los autodenominados Jata y Urbasa.