vitoria. El Partido Popular ya había advertido desde hacía meses que los estatutos de la nueva Batasuna, dijesen lo que dijesen, no iban a mover su postura contraria a la legalización, y ayer los más destacados líderes populares cumplieron con su palabra. El presidente de los conservadores en Euskadi, Antonio Basagoiti, afirmó que si a la izquierda abertzale se le niega la papeleta "estará acabada y habremos ganado la partida", y en ese sentido invitó a "no escuchar los cantos de serpiente" de Batasuna, pues "900 asesinatos no se tapan haciendo promesas o con unos estatutos".

Menos locuaz, pero igual de taxativo, se mostró el presidente del PP, Mariano Rajoy, a través de Facebook. "Ni ETA-Batasuna ni ninguna de sus franquicias se pueden presentar a las elecciones autonómicas y municipales", afirmó el líder popular, cuya opinión fue secundada por su número dos, María Dolores de Cospedal. "no basta con condenar lo que se haga en el futuro, sino que hay que condenar también lo que se hizo", manifestó.

Por su parte, la presidenta del Parlamento Vasco, Arantza Quiroga, pidió al Gobierno que cumpla con su promesa de "evitar que Batasuna esté en las instituciones", y recordó "esa negociación con ETA que negaban por activa y por pasiva".

Por último, el secretario general del Partido Popular del País Vasco, Iñaki Oyarzábal, pidió que "nadie se deje engañar" y "responsabilidad al Gobierno para que cumpla con su obligación".