Vitoria, 17 ene (EFE).- Iñaki San Juan, administrador de dos impresas implicadas en la presunta trama de cohecho de Álava, ha apelado al Ararteko al considerar que la comisión del Parlamento Vasco que investiga las responsabilidades políticas en este caso ha vulnerado su "derecho a la intimidad y a la imagen".
San Juan ha acudido hoy a la comisión, después de no haber ido a la primera de las citaciones el pasado 3 de enero. Tras su comparecencia, ha entregado a los periodistas un comunicado en el que ha denunciado "filtraciones" por parte de este órgano, lo mismo que ha criticado en otra nota una de las imputadas en este proceso Iratxe Gaztelu y que, además, ha provocado que abandonen esta comisión los representantes de Aralar.
El compareciente de hoy es el administrador de dos empresas que recibieron contratos de manera presuntamente irregular desde el Departamento vasco de Cultura.
Ha asegurado sentirse sometido a un "linchamiento mediático" y ha explicado que su "supuesta incomparecencia" se debió a que la comisión no le citó "de forma legal, fehaciente y en un plazo mínimo de siete días" porque no fue avisado "hasta pasada la fecha de la comparecencia".
Ha precisado que ha decidido asistir "para impedir el ataque a la imagen del partido político contra la que ha sido constituida", en referencia al PNV.
San Juan ha mostrado su malestar porque la comisión hiciese público su nombre, mientras que un funcionario del Departamento de Cultura que acudió a la misma pudo mantener en secreto su identidad. A su juicio, esto supone que "se ha discriminado a unas personas con respecto a otras".
Por ello, ha denunciado la vulneración de su "derecho a la intimidad y a la imagen" ante el Ararteko y ha insistido en que está sufriendo "las graves consecuencias" del comportamiento de la comisión, a la que ha acusado de obedecer a "cálculos electorales".
Por su parte, el abogado de Iratxe Gaztelu, una de las administradoras de una empresa presuntamente implicada, ha enviado una carta al Parlamento Vasco, en la que ha denunciado la filtración de la comparecencia de su defendida en la comisión.
Ha indicado que la información publicada al día siguiente, el 13 de enero, por dos diarios, "reflejaba claramente que alguno de los miembros de la comisión había quebrantado su obligación de guardar secreto de lo tratado".
Ha advertido de que el contenido de estas informaciones era "falaz y malintencionado" y ha insistido en que dejan claro que hay "filtraciones que perjudican gravemente el honor" de su defendida porque "pueden complicar su derecho de defensa".
Así, ha pedido a la presidenta de la Cámara, Arantza Quiroga, que vele para que se respete el reglamento de la misma y ha reclamado medidas para que no se repita esta situación.
En este sentido, la existencia de "filtraciones constantes y continuas" ha provocado que Aralar haya decidido abandonar la comisión hasta que éstas cesen, tal y como ha adelantado hoy su parlamentario Mikel Basabe, quien ha recordado que violar el secreto de las deliberaciones de la misma es delito.
El presidente de la comisión, Juanjo Agirrezabala, también ha hablado hoy para responder a San Juan y a Aralar. A San Juan le ha dicho que el procedimiento para citarle ha sido el "normal" y que, para convocar a todos los llamados está siendo "exquisito". Además, ha señalado que el último burofax que se le mandó el 4 de enero "todavía está sin recoger".
Ha manifestado que "se ha preservado la imagen de las personas que lo han pedido". Precisamente, según ha apuntado, los dos ertzainas imputados en la trama de espionaje político no declararán el próximo miércoles en el Parlamento, sino en su lugar de trabajo, para preservar su identidad dada la labor que desarrollan.
Asimismo, Agirrezabala ha señalado que el anuncio de Aralar le ha causado "sorpresa" porque este grupo permanece en la comisión que investiga el conocido como "caso Margüello", en la que ha recordado que también se producen filtraciones. EFE