MADRID. "Llegará el fin de la violencia de ETA, pero la memoria de las víctimas -incluyendo desgraciadamente la del agente Nérin (el gendarme francés, último asesinado por la banda terrorista) y la de tantos y tantos más- no se extinguirá y perdurará entre nosotros", ha subrayado en el Palacio de la Moncloa ante los familiares de todos los agentes muertos en 2010 en acto de servicio.
En este acto y ante representantes de las altas instituciones y de todas las fuerzas políticas, ha garantizado que "si permanecemos unidos como sociedad, con firmeza y determinación, en defensa de nuestra democracia y nuestros valores, apoyando a las fuerzas y cuerpos de seguridad en el buen trabajo que hacen, el fin definitivo de la violencia llegará".