bruselas. El ex ministro socialista Johan Vande Lanotte, al que el rey Alberto II de Bélgica nombró mediador en las conversaciones entre los partidos flamencos y francófonos para formar una coalición de Gobierno tras las elecciones del pasado 13 de junio, presentó ayer su dimisión ante el monarca, lo que podría abrir la puerta a la próxima convocatoria de nuevos comicios.

El monarca, que recibió en audiencia a Vande Lanotte a las 16.30 horas en el Palacio de Laeken, no confirmará si acepta o rechaza su dimisión hasta el próximo lunes, según informaron medios locales.

Alberto II entablará ahora una ronda de consultas con los siete partidos que negocian la coalición de Gobierno y volverá a reunirse el próximo lunes con Vande Lanotte.

La dimisión de Vande Lanotte podría precipitar la convocatoria de nuevas elecciones legislativas en un país que lleva ya 207 días sin un Ejecutivo desde las elecciones de junio pasado que ganó el partido nacionalista flamenco N-VA de Bart De Weber.

Sin embargo, los otros dos escenarios que también se barajan es que continúen las negociaciones, bien bajo los auspicios de Vande Lanotte si el monarca rechaza finalmente su dimisión o con un nuevo mediador o que se forme un Gobierno temporal encargado de gestionar los asuntos socioeconómicos en el país.

reservas sobre las propuestas El mediador, alegó que mantiene "reservas fundamentales" sobre su última propuesta para formar un Gobierno de coalición. La propuesta introduce las directrices principales para impulsar la reforma de la ley de financiación y de transferencia de competencias, la financiación de Bruselas y el futuro del distrito de Bruselas-Ha-Vilvorde (BHV), polémica región periférica de la capital que se disputan flamencos y francófonos, entre otros, por los derechos lingüísticos y de voto de los francófonos. El N-VA insistió el miércoles en su intención de trasladar sus observaciones sobre la propuesta al resto de partidos la espera de ver si "son aceptables" para ellos y ver si continuar las negociaciones.