Vitoria. La inminente presentación de unos estatutos en principio ajustados a la Ley de Partidos por parte de la izquierda abertzale tradicional va a suponer un reto, se mire desde la perspectiva que se mire, para la clase política vasca. Ayer en el Parlamento las formaciones volvieron a poner negro sobre blanco cuál es su visión sobre el particular, y si PSE y PP limaron asperezas para reclamar a Batasuna un "rechazo concreto a ETA", como explicó el portavoz socialista José Antonio Pastor, los grupos nacionalistas acusaron sin ambages a los firmantes del acuerdo de bases de elevar el listón lo suficiente como para que los aludidos no puedan dar el salto sin tropezar.

Populares y socialistas aprobaron, con el apoyo de UPyD, una enmienda transaccional que aplaude el endurecimiento de la Ley Electoral y apoya "de manera singular" al Gobierno para "evitar que se produzca una sucesión fraudulenta de los herederos de Batasuna". Carlos Urquijo, del PP, recordó que el Tribunal de Estrasburgo avala la ilegalización, y afirmó que el estrecho marcaje a Batasuna emana de la propia Ley de Partidos, de su artículo 12, en concreto, y no supone por tanto una "condena preventiva".

Por su parte, José Antonio Pastor, pese a afirmar que el "rechazo genérico" de la violencia no es suficiente, negó que los socialistas quieran excluir a la izquierda abertzale de los comicios. "¿Quién ha dicho que no queremos que esos señores cumplan la Ley? Yo estaría encantado", afirmó el portavoz del PSE, quien esperó "de unos y de otros que respeten la decisión de los tribunales, sea cual sea".

PNV, Aralar y EA, que pidió en una enmienda la derogación de la Ley de Partidos, no creen en la imparcialidad de los socialistas. Según estos partidos, PP y PSE temen que la papeleta de la izquierda abertzale altere el actual equilibrio de fuerzas, que ha abierto las puertas de Ajuria Enea a un Gobierno constitucionalista. "Esta iniciativa viene aquí porque saben que van a cumplir la Ley, ¿qué nuevas fórmulas van a inventar para que no estén?", planteó el jeltzale Joseba Egibar.

Mikel Basabe, de Aralar, se preguntó por qué "ANV fue legal -Juntas Generales- e ilegal -Ayuntamiento- en Vitoria", y emplazó a Urquijo a reciclarse, "porque si no lo van a jubilar". Juanjo Agirrezabala, de EA, aseguró que "la Ley de Partidos se les ha quedado corta para preservar sus intereses políticos y electorales", y Mikel Arana, de Ezker Batua, pidió que se deje hacer a los tribunales, y emplazó a socialistas y populares a "no abstraerse de lo que está ocurriendo". Desde UPyD, Gorka Maneiro avaló la Ley como "un instrumento clave para ver casi derrotados a los terroristas".