Vitoria. El mal trago que hubo de pasar el lehendakari, Patxi López, cuando PNV y PSOE pactaron los tiempos del traspaso de las políticas activas de empleo durante la negociación presupuestaria del año pasado llevó al Gobierno Vasco a dar un golpe encima de la mesa. El lehendakari afirmó que los pactos a los que puedan llegar los jeltzales con el PSOE este otoño en el Congreso deberán pasar por el filtro de Lakua.

Ayer el diputado nacionalista José Ramón Beloki negó en los micrófonos de Radio Euskadi esa capacidad de veto que anunció López, basándose en los precedentes de años anteriores. "Las cosas son como son, diga lo que diga el señor López de turno, y yo sé que el PSE tiene un ámbito de maniobra propio, pero eso de que todo lo que va a hacer el señor Zapatero con el PNV va a pasar por el filtro, no se lo cree ni el señor López, y el señor Zapatero por supuesto que ni lo piensa, y nosotros tampoco", afirmó.

En todo caso, según Beloki esa negociación presupuestaria se encuentra en una "vía muerta" en unas fechas, casi mediados de agosto, en las que al menos debería existir una guía sobre la que ir trabajando.

Zapatero va a necesitar del apoyo de PNV o CiU para sacar adelante sus Cuentas en un difícil curso para el presidente del Gobierno, y el PNV le advierte de que no espere un cheque en blanco por parte de los jeltzales. "Otra cosa es que podamos echar una mano para resolver problemas, los suyos y los nuestros", matizó Beloki.

Según el representante de los jeltzales en el Congreso, el PNV "está dispuesto a hablar sobre qué salida se le da" a la actual coyuntura, en un "momento económico y político muy delicado, especialmente para Zapatero", aunque "está por ver" si ambas formaciones coincidirán en sus diagnósticos.

En todo caso, el diputado del PNV reclamó tanto a Rodríguez Zapatero como al PSE y al PP vasco que "sean medianamente sensatos y no sometan al País Vasco a las tensiones a las que lo vienen sometiendo, sin pies ni cabeza, sin ninguna orientación ni provecho para la sociedad".