MADRID. La credibilidad de Zapatero, según Rajoy, "ha tocado suelo" al no decir la verdad sobre datos como los ingresos o el déficit, y hacer con esta actitud un "daño descomunal" a la economía del país.

Zapatero, por su parte, ha vuelto a insistir en que la posible tasa de paro del 20% en el primer trimestre será la más alta y empezará a bajar a partir del segundo, al tiempo que apuntó que es "posible" que la economía haya crecido ya entre enero y marzo, aunque la recuperación del empleo, admitió, vaya a "ser más lenta".

El presidente del Gobierno y el líder del PP volvieron a centrar en la economía su cara a cara semanal en la sesión de control del Congreso, en la que el líder de la oposición enumeró varios datos como la caída de la bolsa, el aumento del déficit público, y el del diferencial de la deuda pública con la alemana para justificar su ataque al presidente.

"Se le está acabando el tiempo para hacer lo que debe hacer". Con esta advertencia inició Rajoy el debate, y tras su lista de malos resultados acabó preguntando al presidente si va a hacer "igual que la semana pasada, la anterior, la anterior o la anterior".

Entre las cifras aportadas por Rajoy estuvo el aumento del 15% en el déficit público en términos de contabilidad nacional y del 37% en términos de caja, que, según subrayó, generan "más desconfianza" sobre la deuda pública, lo que hace subir su diferencial, mientras también se eleva el coste por el seguro de su impago.

Zapatero respondió al presidente del PP con más datos, como el del primer aumento de los ingresos del Estado en dos años, la subida en marzo de las afiliaciones a la Seguridad Social, "que será mejor en abril" y en meses sucesivos o el incremento del consumo energético.

En la contrarréplica del líder de los populares se elevó la temperatura del debate, porque Rajoy acusó a Zapatero de "no haber dicho la verdad" y le reprochó haber destacado un aumento de los ingresos públicos que sólo se ha debido, advirtió, al ajuste de las devoluciones.

Además, advirtió a Zapatero de que su credibilidad para afrontar la crisis "ha tocado suelo" y le está haciendo un "daño descomunal" a la economía, un broche por el que fue aplaudido y vitoreado por toda la bancada popular durante varios segundos.

Pese a este ataque, el jefe del Ejecutivo aseguró reafirmarse en sus datos y pidió a Rajoy que los leyera bien en lugar de "tocar de oído" como hizo en su intervención.

Zapatero no tuvo tiempo para terminar la frase en la que le pedía a Rajoy una política más constructiva para ayudar a crear empleo, aunque a la salida del pleno aclaró a los periodistas cómo acababa su intervención.