londres. El primer ministro británico, Gordon Brown, prometió ayer reconstruir la economía y defender los servicios públicos al dar a conocer el programa electoral con el que espera obtener para el Laborismo un cuarto mandato. Acompañado por sus ministros, Brown eligió el hospital Queen Elizabeth de Birmingham (centro de Inglaterra, que será inaugurado en el verano) para presentar el manifiesto con el que busca renovar el apoyo electoral en los comicios generales de este 6 de mayo, para los que los conservadores, en la oposición, parten como favoritos.

Titulado Un Futuro Justo para Todos, el programa es un "plan radical y realista" para el país, que pone énfasis en la economía y en recuperar la confianza de los británicos en la política. "Es -dijo- un plan que empieza con asegurar la recuperación (económica) y renovar al Reino Unido como un país más justo, más ecologista, que rinda cuentas y sea más próspero". Entre otras cosas, Brown afirmó que habrá prudencia en el gasto público, se reducirá el déficit en cuatro años, pero sin que ello suponga perjudicar los servicios públicos esenciales. Su partido, dijo, no aumentará el impuesto sobre los ingresos, aunque no prometió que esto pueda extenderse al IVA, si bien aseguró que éste no será incrementado en los productos básicos. El Laborismo espera crear un millón de empleos en nuevos oficios y establecer un Banco de Inversión Ecologista a fin de canalizar fondos hacia tecnologías verdes.