Barcelona. El presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla, aseguró ayer que cumplirá la sentencia que dicte el Tribunal Constitucional sobre el Estatut pero advirtió de que no se debe confundir acatamiento "con silencio resignado", por lo que defenderá el texto "hasta las últimas consecuencias". Montilla avisó que no renunciará "a nada" de lo aprobado por el pueblo catalán y rechazó pronunciarse sobre las consecuencias que tendría una posible rebaja del texto constitucional, aunque reconoció que se crearía "un pequeño problema". "Espero que no se dé y si se da, que seamos capaces de solventarlo", sostuvo. Para el presidente de la Generalitat, una sentencia opuesta al Estatut afectaría "a todos" los que votaron a favor del texto, entre los que se incluyó a sí mismo y al jefe del Ejecutivo, Rodríguez Zapatero.
Montilla rechazó que sus palabras se interpretren como una amenaza al Tribunal Constitucional y acusó de "mala fe" a quien así lo haga, ya que insistió en que su voluntad es defender el autogobierno catalán. "Si le va bien a Cataluña, le va bien a España, y si le va mal a Cataluña, España se resentirá", advirtió.
Según defendió, él "nunca ha actuado buscando el enfrentamiento de Cataluña con los demás pueblos", y subrayó la importancia de la Constitución como elemento diseñado "para unir". Por eso, avisó de que el Estatut presenta "una encrucijada" de la que sólo se podrá salir si se conjuga "el respeto por el Estado de Derecho con el respeto por la voluntad del pueblo de Cataluña".
"Cualquier solución que menoscabe cualquiera de estos tres elementos será mala para todos porque frustrará las aspiraciones de Cataluña de autogobernarse en el marco de la Constitución y deteriorará el espíritu constitucional", defendió antes de sostener que, los catalanes no quieren ser parte de una España que exija "ser cada día un poco menos catalanes para ser españoles".
En su intervención, Montilla arremetió contra la actitud del líder del PP, Mariano Rajoy, destacó que España "no se ha roto" con la aprobación del Estatut pese a que se haya intentado "agitarla desde el primer momento". El presidente de la Generalitat quiso preguntar a Rajoy en sus iniciativas contra el texto estatutario catalán. "¿Qué nos pretende decir, que los catalanes no cabemos constitucionalmente donde sí caben el resto de españoles?".
Por su parte, el presidente de CiU, Artur Mas, acusó a Montilla, de estar "muy cruzado de brazos" ante la próxima sentencia sobre el Estatut. Pidió al presidente que "más que ir acusando a unos y a otros", encabece una reacción catalana. Mas recriminó que no exista una respuesta unitaria de los partidos catalanes y que, en cambio, periódicos de tendencias distintas hayan hecho un editorial conjunto.