“Controvertida”, dicen...
Cuando Pablo Iglesias era un contertulio habitual, dijo que quienes trabajaban en los gobiernos con carné de su partido eran unos “pesebreros”. Ahora que Pablo Iglesias es vicepresidente del gobierno español, el medio digital que han promocionado desde las cuentas oficiales de Podemos lanza un editorial sobre la necesidad de los “asesores” (¡cómo cambian las palabras cuando cambian los momentos!), después de que muchos otros medios hayan criticado el alto número de personas que han sido contratadas en los ministerios de Podemos. Quien hizo por convertirla en “una cuestión controvertida” fue aquel contertulio.
Alguien tenía que hacerlo
Conozco a muchos políticos y sé que su agenda es terrible: la mayoría trabajan casi todo el tiempo y el poco que tienen libre lo aprovechan, normalmente, con su familia y preparándose para la siguiente jornada laboral. Por eso no me cuadra que Pablo Iglesias saque horas para hacer entrevistas para su canal en YouTube como antes de ser vicepresidente. Anitta Ruiz se pregunta si “es estético” que lo realice y lo difunda como si alguien tuviese que hacerlo y, vaya, al final es él quien se remanga. Para mí, desde luego, no lo es. Pero igual mi visión está condicionada porque sé de qué va su trabajo y lo que conlleva.
¿Cómo se consigue?
Pablo Iglesias es aficionado a las series en televisión, tiene tres hijos (lo que en sí mismo me parece una heroicidad) y una compañera de vida, tiene una casa con jardín, lidera un partido con mano firme y colabora en la campaña catalana, y es vicepresidente del primer gobierno español de coalición en medio de una pandemia y una crisis económica sin antecedentes. ¿Cómo consigue además hacer vídeos para su canal en YouTube? Con “siete actos oficiales en un mes” (Vozpópui). Evidentemente, a algo tiene que quitarle tiempo. Es humano. Por cierto, “ninguno en lunes”, según el mismo digital.
Tampoco tiene tiempo para explicaciones
Aquel Pablo Iglesias contertulio seguro que hubiera dedicado tiempo a esta noticia en La Política Online: “El Gobierno paga 2,6 millones de euros a Accenture para reforzar la Inspección mientras 86 subinspectores cobran sin trabajar. Una promoción de funcionarios de Inspección cumplirá año y medio cobrando un sueldo público sin acudir a su puesto de trabajo como consecuencia del limbo generado tras la división de los Ministerios de Trabajo y Seguridad Social”. Si eso no es desaprovechamiento de los recursos, privatización de una función pública y contratación a grandes empresas, ¿qué lo es?
Iglesias no se lo ha pedido “todavía”
El lunes leí la noticia de que había alguna posibilidad de que Juan Carlos Monedero fuese el candidato a la alcaldía de Madrid por Podemos. La dejé pasar: la información se basaba en noticias de otros medios que casi especulaban con la posibilidad y el propio Monedero se autodescartaba. Pero cuando llegué a esta pieza de Público lo reconsideré porque aparece en este digital, porque aseguran que su bloguero de cabecera está “abierto” a presentarse, y porque afirman que Iglesias no se lo ha pedido “todavía”. Y ese adverbio lo cambia todo en un partido en el que las caras visibles siempre son las mismas.