Algo que tendrían que aprender y poner en práctica muchos de los políticos. Yo, como el ciudadano que daba las gracias a la persona que recogió el bolso que él había perdido, he tenido la experiencia de haber perdido la cartera con toda la documentación, tarjetas, etcétera, y, a los diez minutos (que no sé si llegó), ya me avisaron de que la tenían en un establecimiento sin saber yo siquiera que la había perdido. Ya le dije a la persona que lo hizo, después de agradecérselo, que personas como ella eran las que hacían falta.