ES muy conocido el dicho de que una mentira repetida mil veces se convierte en verdad. Vamos a usarlo como referencia para aplicar un dicho nuevo: una frase repetida mil veces en diferentes contextos termina no significando nada. He escogido una selección de frases huecas, las cuales oímos o leemos todos los días en los medios o a conocidos y que terminan por no significar nada. Por supuesto, es una selección personal. Estaría encantado de recibir más sugerencias. Comenzamos:

Estamos en una encrucijada. No sé la razón, pero siempre que hay que tomar una decisión llamamos encrucijadas a lo que son simples decisiones. El cine, el balonmano, las instituciones, la Casa Real?, si es que en todos los ámbitos de la vida estamos en encrucijadas. Solo existe un tipo de encrucijada: aquella dada por decisiones que no tienen vuelta atrás o que si la tienen son muy costosas.

Esto es un acontecimiento histórico. Al día hay muchísimos acontecimientos históricos. Cualquier medalla, cualquier victoria (se ha marcado un gol en 35 segundos? es histórico), cualquier nombramiento, cualquier cosa es histórica. Esto hace que no podamos percibir los cambios reales y que desnaturalicemos la historia. ¿Qué se puede considerar histórico en el siglo XXI? Es un debate, pero sin duda habría que establecer el 11S, la guerra de Irak, la primavera árabe y el estallido de la Gran Recesión, en la que estamos inmersos.

Estas son las elecciones más importantes de la historia. Claro, todas lo son. Se trata de sobreestimar cada momento. Si pensamos un poco, podemos argumentar que las últimas elecciones realizadas en España ¡han sido las menos importantes de la historia! Basta ver de dónde vienen muchas de las decisiones del Gobierno: de la troika (Banco Central Europeo, Fondo Monetario Internacional y Unión Europea). Además, eso no es lo peor. Lo peor es que al ritmo que vamos, cada elección va a ser menos importante ya que cada vez gobiernan más desde fuera. ¿Quién ha votado a Mario Draghi?

Voy a gobernar para todos. Siempre la misma cantinela cuando se ganan unas elecciones. Es muy fácil dar la mano en ese momento, pero luego los intereses personales, y sobre todo los intereses del partido pesan muchísimo. Por desgracia, a veces es más exacto: "voy a gobernar para los míos y para los que me financian".

Esto hay que hacerlo sí o sí. Otra frase que no entiendo. Lo que depende de mí sé que lo puedo hacer; por ejemplo levantarme todos los días a las siete de la mañana. Pero muchas cosas dependen de mi interacción con los demás, y en este caso la afirmación carece de sentido. Un duelo deportivo no se puede ganar sí o sí ya que depende de las prestaciones de los dos equipos rivales.

Todo lo que estamos viendo alrededor de mi persona es una conspiración. Como dicen los norteamericanos, "si anda como un pato, nada como un pato y canta como un pato posiblemente sea un pato". Pocos casos recuerdo en los que se hayan demostrado conspiraciones. En todo caso son matices de los jueces los que hacen que muchas personas no terminen condenadas (tenemos muchísimos casos recientes que enseñan que muchas veces la verdad real y la judicial no coinciden).

Tengo un respeto enorme por todas las decisiones de la justicia. Claro, siempre y cuando no me perjudiquen o vayan contra mis intereses. Si ese respeto existiera, no habría tanta recusación a los jueces (una estrategia muy útil, sobre todo si eres rico y tienes dinero) o tanta presión a los mismos (la presión a la juez Alaya en el caso de los ERE de Andalucía es enorme). Si ese respeto existiera, los órganos judiciales no estarían tan politizados.

Estamos comenzando a salir de la crisis (equivalente: esto es el principio del final; ahora bien, ¿no será el final del principio?). Hemos llegado a tal nivel de parados que si bajan un poco ya hemos salido de la crisis. Además, si salimos (cosa que no va a ocurrir ya que estamos viviendo un cambio de modelo productivo), ¿en qué condiciones se va a quedar la sociedad? Pero, ¿no está claro que el sistema económico está resquebrajando el sistema social? Demonios, ¡que no se debaten soluciones!

Tengo más ilusión que nunca. Una vez más, esta frase es consecuencia de la sobreestimación del presente. Muchas personas que repiten puesto en una presidencia dicen lo mismo. Deportistas que comienzan una nueva temporada también. Pero es que el nunca no deja de aparecer. "Unas rebajas como nunca las habías visto", "un viaje como nunca se ha hecho", o "he pasado una mala temporada pero ahora estoy como nuevo con más fuerza que nunca".

Tienes todo mi apoyo y solidaridad. Cuando ocurre una desgracia como la que hemos sufrido en Galicia, Internet se inunda de mensajes de apoyo. Y bien está, pero muchas veces queda como frase hueca. No entiendo el apoyo y la solidaridad si no es con tiempo, bienes propios o dinero. Por supuesto, un deportista que está muy lejos no puede ir hasta Galicia. Y aunque los deportistas que tenemos son muy respetables, echo en falta algo de su tiempo para apoyar a personas más débiles y para dar más esperanza, que a veces solo se visitan hospitales cuando ocurre una catástrofe o en Navidad. ¿Por qué no un poco más?

La razón es muy sencilla. Mucha solidaridad de la que vemos es la que ofrecía el tío Gilito y se define así: "Solidaridad, toda. Dinero, nada".