El Ministerio de Defensa de Israel considera que Hamás ha quedado en una situación "irrelevante" en el norte de Gaza, tras haber huido muchos de sus combatientes al sur de la Franja palestina.

"En el norte hemos destruido doce batallones de Hamás, lo que no significa que hayamos eliminado a todos", dijo este martes el ministro Defensa de Israel, Yoav Gallant, en una visita a las tropas israelíes en Gaza.

Gallant, según un comunicado del Ministerio, añadió que muchos de los "15.000 o 18.000" supuestos miembros de Hamás en el norte del enclave costero fueron abatidos o huyeron al sur, sin precisar más estas cifras.

Por ello, el grupo islamista perdió su capacidad de realizar acciones en el norte como observar los movimientos de tropas israelíes para atacarlas, añadió, al destacar que "ese escenario es irrelevante allí".

El ministro subrayó la importancia de mantener el control de la carretera de Saladino, que es clave para el tráfico rodado en Gaza, en su objetivo de mantener el control en el norte y "enfocar" la ofensiva militar en el sur, en Jan Yunis, donde Israel cree que se esconden líderes de Hamás.

En el sur de la Franja, "la realidad es diferente" y la ofensiva se dirige a los túneles de Hamás, donde supuestamente permanecen su líderes "a gran profundidad", advirtió.

Gallant aseguró que "varios tipos de operaciones pronto se llevarán a cabo", entre ellas algunas "especiales", sin concretar detalles.

Por su parte, el Ejército de Israel informó de la muerte de un sargento en combate en Gaza, mientras que dos oficiales y tres soldados fueron heridos gravemente.

Desde el comienzo de la ofensiva terrestre el pasado 27 de octubre, los muertos en sus filas suman 174 y 983 los heridos, según datos del Ejército israelí.

El brazo armado de Hamás, la Brigadas al Qasam, afirmaron haber abatido a cinco soldados israelíes con disparos a corta distancia en el campo de refugiados de Bureij, en el centro del enclave.

Hamás lanzó el 7 de octubre un ataque a Israel con más de 1.200 muertos y unos 240 secuestrados que fueron llevados a Gaza.

Israel declaró la guerra al grupo islamista y comenzó una ofensiva militar por tierra, mar y aire que ha provocado al menos 22.185 muertos y 57.035 heridos, la mayoría niños y mujeres, según el Ministerio de Sanidad del enclave palestino, controlado por Hamás.