Una niña de un año murió este lunes en California después de recibir un disparo accidental por parte de su hermano, tan solo dos años mayor que ella.
Sobre las 7.30 a.m. hora local (13.00 GMT), la policía local recibió una llamada para reportar disparos en una casa en Fallbrook, un suburbio en el norte de San Diego, según informó la oficina del sheriff del condado de San Diego, en el sur de California, en un comunicado.
Cuando los agentes de policía llegaron al lugar de los hechos, encontraron que los disparos habían sido provocados por un niño de 3 años que consiguió tener acceso a una pistola que no tenía seguro y disparó "accidentalmente" en la cabeza de su hermana menor.
La policía no ha revelado el nombre del menor fallecido "por respeto a la familia y por ser menor de edad", según indicó la oficina del sheriff en un comunicado.
A su vez, las autoridades informaron que han abierto una investigación para esclarecer "con más detalles" la causa de la muerte.
California es uno de los estados con mayores restricciones al porte de armas, permitido para los mayores de 21 años.
