El ministro de Defensa de Ucrania, Oleksi Reznikov, ha asegurado este viernes que el país ya es miembro 'de facto' de la OTAN a pesar de no haberse adherido formalmente a la Alianza.
Reznikov ha indicado así que "las Fuerzas Armadas ucranianas ya forman parte de la OTAN". "'De facto, no 'de iure'. Porque tenemos armas y sabemos cómo usarlas. Es por eso que confío en que accedamos a la Alianza a corto plazo", ha puntualizado en una entrevista con la cadena británica BBC.
En este sentido, ha descartado que estas palabras sean "ambiguas tanto para la OTAN como para Rusia" dado el apoyo prestado por la Alianza a Ucrania en plena invasión del territorio.
Asimismo, ha expresado su confianza en que Ucrania recibirá más armamento por parte de Occidente, incluidos vehículos blindados y cazas ante la posibilidad de que Rusia se esté preparando para nuevas ofensivas de cara a primavera.
Además, ha matizado que se estima que Rusia pierde unos 500 militares al día en todo el país. Es por ello que considera que las fuerzas rusas se están preparando para "llevar a cabo ofensivas desde áreas ocupadas del este y el sur del país".
"La primavera es el mejor momento para reanudar las operaciones", ha puntualizado.
Rusia supedita a Moscú la central de Zaporiyia
La Corporación Estatal de Energía Nuclear rusa Rosatom ha modificado este viernes la dirección legal de la central nuclear de Zaporiyia, que se encuentra bajo el control de las fuerzas rusas desplegadas en Ucrania en el marco de la invasión del territorio, y la ha supeditado a Moscú.
Así lo ha confirmado en un comunicado la compañía nuclear ucraniana Energoatom, que ha alertado de que Rusia "ha ocupado la mayor central nuclear de Europa". "Ahora han cambiado su dirección para que esté falsamente supeditada a Moscú", ha puntualizado la empresa.
"Las fuerzas de ocupación están tratando nuevamente de vincular la central al territorio de Rusia, pero estas acciones no cambiarán su estatus legal de ninguna forma", ha puntualizado Energoatom, según ha recogido la agencia de noticias Ukrinform.
En este sentido, ha lamentado que el Ejército ruso está "incautándose de bienes pertenecientes a los proveedores de energía bajo el pretexto de cubrir las necesidades de sus Fuerzas Armadas". "Asaltan negocios locales para llenar sus bolsillos", ha subrayado.
La central de Zaporiyia cayó en manos del Ejército ruso a principios de marzo de 2022. Por el momento, unos 1.500 trabajadores de la planta se han negado a cooperar con las fuerzas rusas, por lo que han sido expulsados de la central.
