- Ucrania aseguró ayer que el frente está prácticamente congelado, con pequeñas victorias locales de sus unidades, mientras que las fuerzas rusas informaron del bloqueo de varias ciudades y dieron prácticamente por terminada la primera fase de la operación militar en el país vecino.
“Una aldea liberada de los ocupantes durante una contraofensiva de las Fuerzas Armadas de Ucrania”, señaló un mensaje de la agencia ucraniana UNIAN, acompañado por imágenes, supuestamente, grabadas en Brovari, en la región de Kiev.
Según la inteligencia británica, los contraataques del Ejército ucraniano y las dificultades de las fuerzas rusas con sus líneas de suministro “han permitido a Ucrania volver a ocupar ciudades y posiciones defensivas hasta 35 kilómetros al este” de la capital ucraniana.
“Es probable que las fuerzas ucranianas continúen intentando hacer retroceder al Ejército ruso a lo largo del eje noroccidental entre Kiev y el aeródromo de (la ciudad de) Hostómel”, a unos 70 kilómetros, según el parte de militar británico.
Según los datos de Londres, “en el sur de Ucrania, las fuerzas rusas todavía tratan de esquivar Mykoláiv mientras intentan avanzar en dirección oeste hacia Odesa”.
Rusia, no obstante, afirmó haber prácticamente completado la primera fase de la intervención. En el mayor parte militar ofrecido por la parte rusa desde el inicio de la ofensiva se aseguró que las Fuerzas Armadas han bloqueado Kiev y Chernígov en el norte de Ucrania; Járkov en el este; Sumy en el noreste; y Mykoláiv en el sur. También se informó de que la región de Jersón, en el sur, y la mayor parte de la región de Zaporiyia, en el sureste, están bajo pleno control de las Fuerzas Armadas rusas.
Las fuerzas ucranianas negaron por su parte que Rusia haya logrado bloquear Kiev y Chernígov. El Estado Mayor ucraniano señaló asimismo que “las tropas rusas tratan de mantener sus posiciones en los suburbios de Sumy y Járkov” y aumenta la presencia militar en el mar de Azov.
La guerra de cifras en cuanto a las bajas de uno y otro bando sigue siendo una constante. Según las autoridades rusas, los muertos en el bando ucraniano superarían los 14.000. Ucrania, a su vez, contabiliza los muertos en las filas rusas en más de 16.100 militares, lejos de los 1.531 muertos que reconoció ayer el Estado Mayor del Ejército ruso.
En este contexto, ambas partes continúan las negociaciones para alcanzar un alto el fuego. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, afirmó ayer que en las negociaciones entre Kiev y Moscú que “se puede decir que hay acuerdos sobre algunos temas”, en concreto en cuatro de seis puntos, según la agencia turca Anadolu.
Entre estos citó la renuncia de Ucrania a adherirse a la OTAN, el reconocimiento del ruso como idioma cooficial, así como concesiones con respecto a la desmilitarización y la “seguridad colectiva”. Por el contrario, afirmó Erdogan, Ucrania no está dispuesta a negociar la cesión de Crimea ni las regiones orientales de Donetsk y Luhansk.