- El ministerio de Asuntos Exteriores del Gobierno de Pedro Sánchez recomendó ayer que los españoles que actualmente se encuentran en Ucrania consideren “seriamente” la posibilidad de abandonar el país temporalmente ante la volátil situación de seguridad motivada por el conflicto con Rusia.

El ministerio que dirige José Manuel Albares recomienda no viajar a Ucrania así como la posibilidad de abandonar este país temporalmente, “por los medios comerciales disponibles, mientras persistan las circunstancias actuales”.

El Ministerio de Asuntos Exteriores tiene registrados alrededor de 500 españoles en Ucrania, en su mayoría trabajadores expatriados y estudiantes, y asegura que la Embajada española en el país les mantiene informados sobre la evolución de la crisis con Rusia y la escalada de la tensión.

España se suma de este modo a una larga lista de países que han aconsejado a sus ciudadanos que salgan de Ucrania ante la posibilidad de un ataque ruso. La lista está encabezada por Estados Unidos, cuyo Gobierno avisó ayer a sus ciudadanos que se encuentren en Ucrania de que no podrá ayudarles en una “zona de guerra” si Rusia invade el país, después de urgirles a abandonar el país y ordenar la salida de la mayoría del personal diplomático. “Las zonas de guerra son inherentemente volátiles, impredecibles y extremadamente peligrosas por definición. Tendremos muy poca capacidad para ayudar a nuestros ciudadanos cuando eso ocurra”, explicó en una llamada con periodistas un alto funcionario del Departamento de Estado.

El funcionario pidió a los estadounidenses que siguen en Ucrania tener expectativas “realistas” sobre lo que el gobierno de su país podrá y no podrá hacer en una situación de conflicto armado, y les recordó que las Fuerzas Armadas no irán a rescatarles en el último minuto. Sobre la retirada del personal de la embajada en Kiev, explicó que se quedarán únicamente aquellos diplomáticos cuyo trabajo resulte esencial para mantener las funciones “principales” .

A nivel europeo, no solo España ha tomado esta decisión, ya que la gran mayoría de los países -Alemania, Francia, Reino Unido, Italia, Bélgica, Dinamarca o Luxemburgo- han realizado la misma petición a sus ciudadanos. Además, la Unión Europea (UE) ha decidido permitir la marcha del personal “no esencial” de su representación diplomática en Kiev.

Frente a esta situación, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, aseguró ayer que “todo está bajo control” y pidió no sembrar el pánico ante la advertencia de un inminente ataque ruso, una eventualidad que él no pudo confirmar. “Como presidente tengo que decir la verdad a la población. Y la verdad es que tenemos diferentes informaciones. Y ahora el mejor amigo de los enemigos es el pánico en nuestro país. Y toda esta información solo ayuda al pánico y no nos ayuda a nosotros”, dijo en una comparecencia en la región de Jersón, al sur del país.

Zelenski insistió en que no puede decir si Rusia atacará en los próximos días Ucrania.