- La Corte Suprema de Brasil determinó el pasado viernes el desbloqueo de los bienes embargados del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva en los casos investigados por la operación Lava Jato, cuyos procesos fueron anulados en el pasado mes de marzo.
Por tres votos a favor y uno en contra, la Segunda Sala del Supremo Tribunal Federal (STF) levantó los bloqueos de bienes de Lula (presidente de Brasil entre 2003-2010) que habían sido definidos en procesos vinculados a la Lava Jato, la mayor operación anticorrupción de la historia del país, que fueron anulados por la máxima corte y remitidos a otros tribunales por problemas de competencias.
En un juicio virtual, el instructor de caso, el magistrado Edson Fachin, fue el único de los cuatro integrantes de la segunda sala que votó contra el desbloqueo, mientras que los demás jueces, Ricardo Lewandowski, Gilmar Mendes y Kassio Nunes Marques, acataron el pedido presentado por la defensa de Lula y votaron por levantar el bloqueo.
Con el fallo, la máxima corte del país revocó una decisión proferida en marzo pasado por el juez Luiz Antonio Bonat, de la 13ª Corte Federal de Curitiba, capital del sureño estado de Paraná, que dictó mantener un embargo de bienes de Lula determinado en el marco de unas causas penales anuladas por la Corte Suprema.
La mayoría de los magistrados de la segunda sala acataron el recurso presentado por los abogados de la defensa del expresidente, que pedía el fin del embargo al entender que la Justicia Federal del estado de Paraná, responsable hasta entonces de las investigaciones de la operación Lava Jato, ya no tiene autoridad para decidir sobre los casos anulados por la Corte Suprema.
“Si la autoridad reclamada (Justicia Federal de Paraná) fue declarada incompetente para procesar y juzgar las acciones penales”, ya “no podría emitir cualquier juicio de valor respecto a ellas, incluso acerca del mantenimiento del bloqueo de los activos del reclamante”, escribió Lewandowski en su voto, que fue acompañado en sus razonamientos por Mendes y Nunes Marques.
A inicios de marzo pasado, la Corte Suprema determinó la anulación de las dos condenas por presunta corrupción que pesaban en contra de Lula, y por las cuales el expresidente llegó a pasar 580 días, casi dos años, en la cárcel, y el fin de otros procesos penales por sospechas de la misma índole todavía en curso.
La decisión permitió que el exmandatario recuperara todos sus derechos políticos, por lo que el expresidente Lula de Silva ya se perfila como el gran favorito y principal rival del actual jefe de Estado, Jair Bolsonaro, para las elecciones presidenciales que Brasil celebrará el próximo año 2022.