- Tanto la Unión Europea como el Gobierno de Estados Unidos han lanzado una seria advertencia al presidente de Turquía, Tayyip Erdogan, por su afán expansionista en Chipre, al tiempo que la ONU expresó ayer su “profunda preocupación” por los anuncios sobre la apertura de una parte de Varosha, el barrio sellado de la ciudad de Famagusta y advirtió contra las “acciones unilaterales” que pueden complicar el conflicto.
El presidente turco, Tayyip Erdogan, cerró el pasado martes una visita al norte de Chipre y dio definitivamente un portazo a las negociaciones de reunificación de la isla al dejar en manos del liderazgo turcochipriota anunciar una apertura parcial de Varosha, contra toda resolución de la ONU. Así, el líder nacionalista turcochipriota, Ersin Tatar, anunció que levantará el estatus de zona militar en un 3,5% de este barrio fantasma de Famagusta, sellado tras la invasión turca, y del que fueron desplazados unos 12.000 grecochipriotas.
Tras la invasión en 1974 de la parte septentrional de Chipre hubo un desplazamiento de cerca de 200.000 grecochipriotas hacia el sur y unos 60.000 turcochipriotas hacia el norte. Diez años después, en 1984 el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó una resolución que prohíbe el asentamiento en Varosha de personas que no sean sus habitantes y pide la transferencia de esta área a la administración de la ONU.
Como respuesta a la postura de Erdogan y su aliado Tatar, el Gobierno de Estados Unidos calificó ayer de “provocativa” e “inaceptable” la apertura parcial de Varosha anunciada por el liderazgo turcochipriota y advirtió que buscará una “fuerte respuesta” en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. “EEUU considera que las acciones turcochipriotas en Varosha, con el apoyo de Turquía, son provocativas, inaceptables e incompatibles con sus compromisos pasados”, aseguró el secretario de Estado, Antony Blinken, en un comunicado.
El diplomático instó al liderazgo turcochipriota y a Turquía a “revertir su decisión anunciada hoy y todos los pasos adoptados desde octubre de 2020”. Además, Blinken advirtió que Estados Unidos ya trabaja con sus aliados “para remitir esta situación preocupante al Consejo de Seguridad de la ONU e instará a una fuerte respuesta”. Asimismo, Washington recordó que sigue apoyando la unificación de la isla en un Estado federal, bizonal y bicomunal.
La postura de Erdogan recibió también el rechazo frontal de la Unión Europea (UE). Así, a juicio del alto representante europeo para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, los anuncios sobre la apertura de Varosha son “inaceptables y causantes de una profunda preocupación”.
Borrell subrayó que la UE “seguirá de cerca” las consultas en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas sobre Chipre y avisó de que decidirá sobre los próximos pasos “en consecuencia”. “La UE una vez más subraya la necesidad de evitar acciones unilaterales contrarias al Derecho internacional y provocaciones renovadas, que podrían aumentar las tensiones en la isla y comprometer una vuelta a las conversaciones sobre una solución integral del problema de Chipre en línea con las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU”, aseguró.
El jefe de la diplomacia comunitaria también reiteró que los Veintisiete están comprometidos con una solución para Chipre que dé lugar a una federación “bizona y bicomunal con igualdad política”, de acuerdo con las resoluciones de la ONU.
Por su parte, Chipre y Grecia pidieron ayer al Consejo de Seguridad de la ONU y a la Unión Europea una respuesta “clara” e “inmediata” a Turquía. Los ministros de Exteriores de Chipre, Nikos Jristodulidis, y de Grecia, Nikos Dendias, recalcaron que la apertura de parte del barrio de Varosha viola varias resoluciones del Consejo de Seguridad y “debe invertirse de inmediato”.
“Los momentos son críticos”, enfatizó Jristodulidis, quien aseguró que su Gobierno continuará actuando con determinación y coordinándose siempre con Grecia y los demás socios de la comunidad internacional. El ministro chipriota apuntó que el futuro del diálogo de paz dependerá mucho de las reacciones que la comunidad internacional tendrá sobre esta cuestión, si bien celebró que tanto la Unión Europea, como Estados Unidos y otros países condenaran inmediatamente la nueva provocación turca.
Por su parte, Dendias descartó una mejora en las relaciones de su país con Turquía mientras las provocaciones y violaciones de Ankara continúen en Chipre, y afirmó que “la agresión turca no puede quedar sin respuesta”.
La respuesta de la ONU llegó en boca de su enviada especial para Chipre, Elizabeth Spehar, quien expresó su “profunda preocupación” por los anuncios sobre la apertura de Varosha y advirtió contra las “acciones unilaterales” que pueden complicar el conflicto en la isla. En declaraciones a los periodistas, Spehar subrayó el “impacto negativo” que este movimiento puede tener en las relaciones entre las partes y de cara a la opción de retomar las negociaciones.
Al anuncio de Erdogan se refirió también el Gobierno de Egipto, que manifestó su “profunda preocupación”. “La República Árabe de Egipto expresa su profunda preocupación por el anuncio del cambio de la situación de la región de Varosha y de abrirla parcialmente, en una contravención de las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas”, se expresó a través de un comunicado el Ministerio de Asuntos Exteriores egipcio.
Olvido. La localidad costera oriental de Varosha, que alguna vez fue el patio de recreo de famosos y apodada la “joya del Mediterráneo”, quedó como una ciudad fantasma vallada, con hoteles de lujo abandonados a la vegetación y al olvido. La invasión vació la ciudad de sus residentes. Varosha, el barrio costero de Famagusta, contaba hasta 1974 con algo mas de 12.000 habitantes grecochripiotas que tuvieron que abandonar sus viviendas, como ocurrió también con el resto del norte de Chipre, y a la inversa con los habitantes turcochipriotas en el sur de la isla. Ahora, y en contra de la resolución de la ONU, el líder turcochipriota Ersin Tatar quiere su apertura con el apoyo de Erdogan.
“EEUU considera que las acciones en Varosha son provocativas e inaceptables”
Secretario de Estado de EEUU
“La UE subraya la necesidad de evitar acciones contrarias al Derecho internacional”
Rpre. de la UE para Asuntos Exteriores