- El estado de tensión permanente que se vive en Estados Unidos desde que se inició la campaña electoral se dispara por momentos. La mezcla de conflictos raciales y votantes republicanos que creen en la acusación sin pruebas de Trump sobre el fraude electoral resulta especialmente peligrosa en el contexto una sociedad armada hasta los dientes. El cóctel ya ha aguantado una jornada electoral que finalmente resultó pacífica, pero cuanto más tiempo se alarga este clima, más difícil es que la convivencia no vuele por los aires.
Alentados por las denuncias de pucherazo por parte del actual presidente, decenas de seguidores de Donald Trump rodearon el Departamento de Elecciones del condado de Maricopa (estado de Arizona), en la ciudad de Phoenix, y se concentraron armados frente al Capitolio de esta misma ciudad, donde es legal portar armas de fuego de gran calibre.
Este tipo de concentraciones con armamento se han ido extendiendo por toda la geografía de EEUU, donde hay especial temor por el dato que muestra que la venta de armas se ha duplicado en los últimos siete meses respecto al mismo periodo del año anterior.
Decenas de personas fueron arrestadas anoche en las calles de Nueva York mientras participaban en manifestaciones en el barrio de Manhattan en las que cientos de ciudadanos mostraron su rechazo hacia la administración de Donald Trump y pidieron el recuento de todos los votos.
Hacia las 22.00 hora local (03.00 GMT) la Policía de Nueva York confirmó 20 detenidos y alegó que "intentaron apropiarse de una protesta pacífica encendiendo fuegos, lanzando basura y huevos en Manhattan", según el Twitter del Cuerpo.
Unas dos horas antes, los manifestantes recorrían las calles aledañas al parque Washington Square Park, en la zona suroeste de la Gran Manzana, al grito de "No Trump, No KKK (Ku Klux Klan), "No Facist USA" y "No Justice, No Peace. Fucking Racist Police".
Tras dispersarse buena parte del grupo, medio centenar de policías antidisturbios acorralaron a los manifestantes a la altura de la Quinta Avenida, donde iniciaron múltiples detenciones.
"Shame on You, The World is Watching" (Os debería dar vergüenza, el mundo os está observando), coreaban poco antes de ser arrestados.
Mientras, otra protesta marchaba por las avenidas de la zona central de Manhattan, flanqueada por agentes, donde se proclamaban lemas contra "todo el sistema".
"No se trata de quién esté en la presidencia", decía uno de los manifestantes que cubría la mitad de su rostro y que no se quiso identificar.
Cientos de personas más se concentraron también en las escaleras de la céntrica Biblioteca de Nueva York, en Manhattan para denunciar los intentos de Trump de frenar el escrutinio en dos estados clave y mostrar su rechazo a la petición del equipo de Trump de recontar los votos en el estado de Wisconsin y las amenazas de solicitar ante los tribunales la detención del escrutinio en Michigan y Pensilvania.