La OTAN ha advertido este lunes de que Occidente vive un 'momento Sputnik', por el que podría verse superado tecnológicamente por China y Rusia, insistiendo en que Pekín y Moscú invierten muchos fondos en el control de su ciudadanía y en influir a las democracias extranjeras.
"Occidente está al borde de un nuevo 'momento Sputnik'. Esto es cuando un poder no occidental puede adelantarnos. Ahora competimos con regímenes autoritarios que hacen un mal uso de la tecnología para desestabilizarnos y manipular nuestro estilo de vida democrático y libre", ha alertado el vicesecretario general aliado, Mircea Geoana, en su intervención en el foro CIBERSEC GLOBAL.
Según el político rumano, la Alianza Atlántica debe mantener el esfuerzo colectivo para aguantar el embate tecnológico de Rusia y China, países que "invierten fuertemente en tecnologías que les ayudan a controlar a su población y en aumentar su influencia en el mundo".
A su juicio, las democracias occidentales pueden resistir la embestida si son capaces de defender principios como el respeto al Derecho Internacional. "Las sociedades abiertas siempre serán más efectivas y más creativas que sociedades cerradas", ha alegado Geoana, insistiendo en que China podrá recopilar gran cantidad de datos de ciudadanos sin consentimiento, pero sus empresas "no están en disposición de cambiar el pensamiento establecido".
Con todo, ha reiterado que la OTAN le da gran importancia al panorama de la ciberseguridad, recordando que un ataque tecnológico puede ser objeto de aplicación del artículo 5 del tratado, relativo a la defensa colectiva de los miembros de la Alianza.
Geoana ha recalcado que, desde 2016, los miembros de la organización militar se han comprometido a fortalecer sus sistemas de ciberseguridad en infraestructuras. Esto se convirtió en una tendencia durante los primeros compases de la crisis del coronavirus, cuando instituciones sanitarias europeas fueron objeto de ciberataques extranjeros.
Aunque ha evitado atribuirlos a Moscú o Pekín, el vicesecretario general ha asegurado que la pandemia ha servido de contexto para atacar a las sociedades occidentales en sus vulnerabilidades.
"Ha habido un incremento de la actividad maliciosa desde el inicio de la crisis. Se ha puesto la diana sobre institutos de investigación, hospitales y servicios sanitarios. Esto es peligroso e irresponsable, puede costar vidas inocentes", ha avisado, explicando que la OTAN no ha dejado sin respuesta estas amenazas.
El pasado mes de junio el Consejo Atlántico Norte, órgano ejecutivo de la OTAN, dijo estar listo para actuar contra estas amenazas, en línea con la defensa colectiva que forma parte de la esencia de la organización. "Reafirmando el mandato defensivo de la OTAN, estamos decididos a emplear toda la gama de recursos, incluido el cibernético, para disuadir, defender y contrarrestar todo el espectro de ciberamenazas", señaló el comunicado de los 30 aliados.