El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, ha constatado un descenso de fallecidos diarios por coronavirus en el estado, hasta los 367, respecto a los 437 de este sábado.
Aunque el confinamiento sigue en vigor hasta el próximo 15 de mayo, algunas regiones del estado podrían abrir antes, "con ciertas precauciones", aunque ha descartado una apertura completa en un futuro inmediato.
En ese sentido, Cuomo ha explicado que en ciertas áreas "de bajo riesgo" del norte del estado de Nueva York se baraja la posibilidad de que ciertas industrias, como la de la construcción, puedan retomar sus actividades antes de esa fecha del 15 de mayo.
No obstante, se ha mostrado cauto ante esa posibilidad, pues ha recordado que los esfuerzos realizados puedan perderse si no se tiene cuidado y no se respetan las medidas y los tiempos necesarios.
El gobernador ha añadido que las autoridades están contemplando la posibilidad de abrir "escuelas de verano" para compensar la matrícula perdida, sin dar por el momento más detalles.
La situación de la ciudad de Nueva York es algo más compleja que la del resto de territorios y regiones de Estados Unidos, pues no sólo es el epicentro de la pandemia en el país, sino que sirve de nexo para muchas otras parte del estado y de fuera de él, al ser el lugar de trabajo de millones de personas.
Por su parte, en la vecina Nueva Jersey, que está sufriendo en estos momentos uno de los peores brotes de todo el país, su gobernador Phil Murphy ha descartado cualquier posibilidad de levantar cualquiera de las restricciones impuestas para frenar el avance de la pandemia.
Según el balance de la Universidad Johns Hopkins, un total de 54.480 personas han muerto en Estados Unidos, para un total de 941.628 contagios. Nueva York es el epicentro de la pandemia en el país. Solo en la ciudad se tiene constancia de 17.126 fallecidos.