La Administración del presidente estadounidense, Donald Trump, está "siguiendo muy de cerca" las informaciones sobre los supuestos graves problemas de salud que aquejan al líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, aseguró este martes Robert O'Brien, asesor de Seguridad Nacional del Gobierno.
"Estamos siguiendo estas informaciones muy de cerca", dijo O'Brien en una intervención en un programa de la cadena de televisión estadounidense Fox.
O'Brien se refería así al artículo publicado por Daily NK, un medio de comunicación digital producido en Seúl por desertores norcoreanos con una amplia red de contactos en el país vecino, que asegura que Kim "se sometió recientemente a un procedimiento cardiovascular".
El texto de Daily NK asegura que los motivos por los que el líder norcorreano supuestamente se sometió a una operación de corazón son "el tabaquismo, la obesidad y el sobreesfuerzo".
En su intervención en el programa Fox & Friends, O'Brien aseguró que a pesar de la crisis del coronavirus, EE.UU. sigue teniendo "ojo avizor en los eventos que ocurren en Corea de Norte, así como en otras partes del mundo".
La noticia sobre los posibles problemas de salud del dictador apareció después de que los medios norcoreanos no le mostraran la semana pasada participando en la tradicional visita al mausoleo de Pyonyang en el que reposan los restos de su abuelo Kim Il-sung.
Es tradición que cada 15 de abril, aniversario del nacimiento de su abuelo y la principal festividad nacional, Kim Jong-un visite el Palacio del Sol de Kumsusan y rinda tributo al fundador de Corea del Norte y que los aparatos de propaganda del régimen cubran ampliamente la información.
El Gobierno surcoreano aseguró este martes que no ha detectado "actividad inusual" en Corea del Norte, quitando peso a los reportes que hablan sobre una supuesta operación de corazón del líder Kim Jong-un e incluso apuntan a que estaría "grave", asimismo Japón ha optado por no comentar esta información.