Hong Kong - El Parlamento hongkonés, que el lunes fue asaltado y ocupado durante tres horas por cientos de jóvenes manifestantes, permanecerá cerrado al menos las próximas dos semanas por los “graves daños” causados a sus instalaciones, aseguró ayer el presidente de la institución, Andrew Leung. En la práctica eso significa que los parlamentarios no se reunirán de nuevo hasta después del verano, ya que a mediados de julio concluye el actual periodo de sesiones. “Mucha gente de Hong Kong compartirá el sentimiento conmigo de que estamos tristes por lo que pasó anoche. Por el interés de la ciudad espero que todos nosotros podamos encontrar el camino hacia adelante de manera razonable”, dijo Leung a los periodistas tras visitar ayer la sede del Consejo Legislativo.

El presidente afirmó que la instalación eléctrica y el sistema contra incendios de la Cámara habían resultado dañados y que su reparación llevará tiempo. Asimismo, dijo que no existen lugares alternativos para que se puedan reunir los parlamentarios.

Leung condenó las “acciones violentas” de los manifestantes y calificó lo que se encontró en su visita a las dependencias del Parlamento como “una gran escena del crimen”.

Los equipos de limpieza municipales se afanaban ayer en limpiar los destrozos ocasionados alrededor de la sede parlamentaria y el cercano Parque Tamar.

Montones de paraguas, cascos, carteles, restos de barricadas, piedras, vallas o los grandes tubos de hierro empleados como ariete por los manifestantes para derribar las puertas de cristal blindado de la institución, se encontraban diseminados por las calles de la zona. Además de las numerosos daños realizados por los manifestantes en el interior, el exterior del edificio también presentaba ayer multitud de pintadas, esencialmente en contra del proyecto de ley de extradición, del Gobierno local de Carrie Lam y de la injerencia de Pekín. - Efe