Toronto - El Tribunal Superior de Quebec determinó ayer que la zona francófona canadiense solo necesita el 50 % más un voto en un posible referendo para hacer posible la independencia de este territorio. Según el tribunal, la Ley 99, que fue aprobada en el año 2000 por el Gobierno francófono del independentista Partido Quebequés (PQ), no es anticonstitucional. La ley señala que los quebequeses tienen el derecho a decidir si se quieren separar de Canadá y que solo es necesario el 50% más uno de los votos emitidos en un posible referendo para hacer posible la independencia. La decisión del juez quebequés es contraria a la Ley de la Claridad que está en vigor en Canadá, que reduce la capacidad de Quebec, o cualquier otra jurisdicción canadiense, a celebrar un referendo independentista. El presidente del grupo independentista Société Saint-Jean-Baptiste, Maxime Laporte, afirmó tras conocer el resultado que cree probable que la decisión del Tribunal Superior de Quebec sea apelada ante el Tribunal Supremo de Canadá.
La Ley 99 es la respuesta del entonces Gobierno de Quebec a la Ley de la Claridad aprobada por el Gobierno canadiense en el año 2000 para determinar si podría celebrar referendos soberanistas y si el resultado de la votación sería aceptado por los anglófonos.
Según la Ley de la Claridad, el Parlamento canadiense decidirá si la cuestión planteada en un posible referendo independentista es suficientemente clara y también tiene que decidir si el resultado representa “una mayoría clara”. El Parlamento canadiense también tiene el derecho a anular el resultado del referendo si considera que los principios de la Ley de la Claridad se han incumplido.
Una “mayoría clara” La referencia a la “mayoría clara” es una de las más controvertidas de la Ley de la Claridad y emana de la decisión del Tribunal Supremo de Canadá, la máxima autoridad judicial del país, que en 1998 determinó que, de acuerdo a las leyes canadienses, Quebec no se puede separar de forma ilegal.
Pero los jueces añadieron que si en un referendo, una clara mayoría de quebequeses vota en favor de la independencia, Canadá “no tendría bases para negar el derecho del Gobierno de Quebec” a la independencia. Para ello sería necesario lo que el tribunal denominó como “una clara mayoría” y dejó al Parlamento canadiense la tarea de decidir que cifra sería necesaria. La Ley de la Claridad no determina la proporción de votos que sería necesaria para que Canadá reconociese el resultado del referendo.
La zona francófona de Quebec ha celebrado dos referendos soberanistas, el primero en 1980 y el segundo en 1995. En este último, los independentistas obtuvieron el 49,42% de los votos frente al 50,58% conseguido por los unionistas. - Efe