Tokio - El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, prometió ayer que pondrá en marcha una “fuerte diplomacia” en su nueva legislatura, para hacer frente a un entorno de seguridad que definió como “el más grave desde el final de la Segunda Guerra Mundial”.

Tras imponerse una vez más de forma arrolladora en las elecciones anticipadas del pasado 22 de octubre, el líder conservador nipón fue reelegido ayer jefe de Gobierno por la Dieta (Parlamento), lo que dio comienzo a su tercer mandato consecutivo.

Abe recibió el respaldo mayoritario de la Cámara Baja, donde su partido, el Liberal Demócrata (PLD), y su socio en el Ejecutivo, el budista Komeito, lograron revalidar su mayoría absoluta de dos tercios en los comicios.

“Hemos recibido un amplio respaldo popular en las elecciones y lo usaremos para aplicar poderosas medidas económicas y una fuerte diplomacia”, dijo Abe en una rueda de prensa después de ser también ratificado en el cargo por la Cámara Alta y de designar a su Gobierno.

El político, de 63 años, afirmó que Japón se encuentra “en la situación de seguridad más grave desde el término de la Segunda Guerra Mundial” y señaló en concreto “las constantes amenazas de armas nucleares y de misiles de Corea del Norte”. - A. Hermosín