Las Vegas - El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo durante su visita al University Medical Center, donde son atendidos muchos heridos en el tiroteo del domingo en Las Vegas (Nevada), que no hablará sobre “la violencia de las armas”. “No hablo hoy sobre la violencia de las armas. Esto fue obra de una persona enferma y demente”, indicó el mandatario en un breve encuentro con los medios de comunicación tras finalizar su visita al centro médico, acompañado por la primera dama, Melania. “Quiero destacar el trabajo de los profesionales que han tratado a las víctimas. Han hecho una labor indescriptible. No queremos ver algo así de nuevo”, apuntó Trump.

Donald Trump y la primera dama, vestida de negro en señal de luto, fueron recibidos por las autoridades locales como la alcaldesa de la ciudad, Carolyn Goodman, y el alguacil del condado, Joe Lombardo, entre otros. “Este es un día muy triste para mí, personalmente”, dijo Trump en declaraciones a la prensa a su salida de la Casa Blanca.

El Buró Federal de Investigaciones (FBI) investiga los motivos que llevaron a Stephen Paddock a cometer el pasado domingo la matanza de Las Vegas (Nevada), la peor de la historia reciente de EEUU y que acabó con la vida de 58 personas y más de 500 heridos.

A Stephen Paddock le recetaron en junio un fármaco contra la ansiedad que puede provocar comportamientos agresivos, informó ayer el diario local Las Vegas Review-Journal. Los documentos obtenidos por el periódico a través de la base de datos del Programa de Supervisión de Prescripciones de medicamentos de Nevada mostraron que el doctor Steven Winkler le recetó a Paddock el 21 de junio 50 pastillas de 10 miligramos del sedante diazepam (valium).

Paddock compró el fármaco sin presentar tarjeta de seguro médico en una farmacia de la cadena Walgreens de Reno (Nevada) el mismo día que se lo recetó Winkler.

experiencias psicóticas El abuso de ese fármaco puede provocar incluso experiencias psicóticas en el consumidor, según detalla el portal especializado drugabuse.com. “Si alguien tiene un problema de agresividad subyacente y lo sedas con ese fármaco, puede suscitar esa agresividad”, indicó al rotativo el doctor Mel Pohl, del hospital Recovery Center de Las Vegas. “Puede desinhibir ese estado emocional. Es parecido a lo que ocurre cuando das alcohol a ciertas personas: se vuelven más agresivas en vez de dormirlas”, añadió.

Paddock modificó 12 armas para convertirlas en automáticas con la intención de disparar municiones contra la multitud a un ritmo más rápido y estuvo disparando entre 9 y 11 minutos, según revelaron las autoridades.

Muchos hoteles de Las Vegas han aumentado el nivel de seguridad en sus accesos tras la masacre. David Straw, vicepresidente de comunicaciones de la empresa Boyd Gaming, que opera siete hoteles y casinos en Las Vegas, dijo ayer que, aunque sus medidas de seguridad ya eran “fuertes” antes de la matanza, estudian ahora cómo mejorarlas. “A la luz de los recientes acontecimientos, estamos revisando esas medidas de seguridad y las estamos aumentando donde es necesario”, explicó Straw. Los conocidos hoteles Wynn y Encore, situados en el principal bulevar de la ciudad, el Strip, y donde se encuentran los principales casinos, pusieron en marcha nuevas medidas de seguridad como la revisión de equipaje y detectores de metal manuales.

De acuerdo con las autoridades, el autor de la masacre, Stephen Paddock, entró al hotel Mandalay Bay con diez maletas con al menos 23 armas de fuego en su interior, entre ellas rifles semiautomáticos y cientos de municiones.

Parte de la investigación busca determinar cómo ni los miembros de seguridad del hotel ni el personal encargado de la limpieza detectaron nada en la habitación ocupada por Paddock, desde donde disparó a los asistentes de un festival de música que se celebraba junto al hotel con 22.000 espectadores. Desde la ventana de su habitación, en el piso 32 del hotel, este jubilado disparó contra la multitud durante un intervalo de entre 9 y 11 minutos con rifles semiautomáticos. - Efe