Praga - El primer ministro de la República Checa, Bohuslav Sobotka, anunció ayer su dimisión y la caída del Gobierno tripartito, a menos de seis meses de las elecciones generales, debido a las dudas sobre el origen del patrimonio del viceprimer ministro, Andrej Babis. “No puedo, como jefe del Gobierno, ser el responsable de que el vicepresidente del Ejecutivo sea un hombre cuyo pasado no está claro”, dijo Sobotka.
Babis, uno de los hombres más ricos del país, es también ministro de Finanzas y jefe del partido ANO, que forma parte de la coalición tripartita en la que están también los socialdemócratas de Sobotka y los democristianos de la KDU. El primer ministro insistió ayer en que su socio de Gobierno no ha logrado eliminar las sospechas sobre posibles irregularidades en las transacciones financieras de sus empresas. Babis es dueño del consorcio agroindustrial Agrofert, de tres periódicos, tres cadenas de televisión y dos emisoras de radio.
Sobotka aseguró que hay sospechas de que el ministro de Finanzas evadió impuestos en el pasado y también que hay dudas sobre el origen de su patrimonio. Por ello, le había pedido que aclarara esas dudas y le dio de plazo hasta el pasado abril. Sobotka aseguró que si en vez de dimitir hubiera destituido a Babis, habría convertido en “mártir” al ministro de Finanzas.
Las tensas relaciones dentro del Gobierno checo se enmarcan también en la campaña electoral para las elecciones que el país celebrará el 20 y 21 de octubre. - Efe