caracas - Miles de opositores al Gobierno venezolano se manifestaron ayer con un plantón en las calles de varias ciudades del país, en una nueva jornada de protestas que discurrió pacíficamente en Caracas pero que registró tres muertos en los estados occidentales de Mérida y Barinas. La jornada se cumplió de forma pacífica durante casi 8 horas, hasta que en dos actos violentos en el interior del país fallecieron tres personas, dos cuando participaban en una manifestación chavista y otra en el escenario de una protesta opositora.
La Fiscalía venezolana confirmó mediante un comunicado que Jesús Sulbarán, chavista de 42 años, falleció tras recibir un disparo en el cuello, presuntamente efectuado desde “residencias cercanas” a una importante arteria vial de la ciudad de Mérida. “Adicionalmente, otras seis personas resultaron heridas” en este hecho, añadió la Fiscalía. Por su parte, el defensor del Pueblo, Tarek William Saab, explicó que Sulbarán, funcionario de la gobernación de Mérida, se encontraba en una “concentración pacífica de afectos al gobierno” cuando desde una residencia lanzaron una “lluvia de disparos” que ocasionaron su muerte. Saab indicó que durante estos hechos de violencia Luis Alberto Márquez, trabajador de transporte de la gobernación, también resultó “gravemente herido” luego de recibir un impacto de bala en la cabeza y se encuentra en un hospital “debatiéndose entre la vida y la muerte”. Márquez fallecería poco después por el disparo recibido.
Más tarde, el gobernador del estado Mérida, el chavista Alexis Ramírez, acusó a “grupos terroristas” por el tiroteo en el que murieron Sulbarán y Márquez y denunció al alcalde de la ciudad, el opositor Carlos García, “que desde esta mañana estaba llamando al plantón”.
Sin embargo, García se desligó en Twitter del ataque y acusó a colectivos ligados al oficialismo de haber disparado contra ellos mismos.
El alcalde aseguró que los presuntos “colectivos del gobierno” que causaron el ataque y generaron violencia y daños portaban banderas y camisas del opositor partido Primero Justicia, en el que milita.
En Barinas murió un hombre identificado como Renzo Rodríguez Roda, de 54 años, según el comunicado de la Fiscalía. Rodríguez Roda se encontraba en las inmediaciones de la alcaldía del municipio Bolívar del estado Barinas, cuando fue alcanzado por un disparo en el pecho, según el Ministerio Público, que indicó que en ese tiroteo otra persona resultó herida. La violencia en estas entidades contrastó con el carácter pacífico de la concentración opositora en la autopista Francisco Fajardo de Caracas, la principal arteria vial de la capital venezolana, que conecta el este y el oeste de la ciudad.
Protesta pacífica en caracas En este lugar miles de opositores se concentraron para pedir que se realicen las elecciones de gobernadores vencidas desde diciembre pasado, y protestar contra la inseguridad y el desabastecimiento que azota a la nación. Fue la primera vez en las últimas tres semanas que las fuerzas de seguridad no disolvieron a los opositores que protestaban cortando la autopista.
Muchos opositores permanecieron en la autopista durante varias horas sentados y jugando a las cartas, leyendo en grupo o simplemente sentados en el suelo y charlando.
El asesor inmobiliario Luis Vale, de 52 años, dijo que a pesar de su cariz festivo, la protesta “para nada” era un festival. “Pero sí es pacífica, porque estamos en contra de la violencia. Esta protesta es efectiva porque es en paz, y así más gente nos acompaña”, añadió. De acuerdo con Vale, la solución a la crisis política en Venezuela pasa por un “cambio de régimen”.
Junto a Vale, y sentada junto a una enorme bandera de Venezuela de casi 20 metros, la gerente deportivo de 42 años María Eugenia González conversaba con otra manifestante.
“Protesto porque como una oprimida no pienso vivir. Y no tengo nada que perder, mis hijos se fueron del país. Necesitamos un cambio”, aseguró la mujer. Los manifestantes que atendieron a la convocatoria del plantón en Caracas escucharon los discursos de una docena de dirigentes de la oposición, entre ellos el de la diputada y activista por los derechos LGBTI Tamara Adrián.
Adrián felicitó a los manifestantes por soportar 8 horas bajo el sol de Caracas, y señaló que la lucha por la democracia y la libertad no es fácil. El dirigente estudiantil Hasler Iglesias consideró que la protesta envió un importante mensaje al Gobierno venezolano: “Si el pueblo se quiere quedar en las calles lo va a hacer”. Sin embargo, la pensionista de 66 años Marisol Rangel dijo estar sorprendida por el carácter festivo de la manifestación. “Me siento en una fiesta, es muy raro (...), no sé cómo vayan a criticar desde el gobierno esta manifestación, porque ellos a todo le dan la vuelta”, señaló.
Con todo, y a pesar de la paz que reinó en la multitudinaria concentración de Caracas, un grupo de jóvenes quemó llantas, rompió cercados y bloqueó un tramo de la autopista Francisco Fajardo con piedras. Los jóvenes regaron también aceite en la calzada con el argumento de evitar que presuntos motoristas de “colectivos” se acercaran a la concentración y causaran daños. - Efe