París - La multiplicación de golpes bajos entre los candidatos está eclipsando el debate de propuestas de fondo en la incierta campaña electoral francesa, a diez días de la primera vuelta y sin que ningún sondeo se atreva a augurar con contundencia el resultado. Cuatro de los once candidatos, la ultraderechista Marine Le Pen, el socioliberal Emmanuel Macron, el conservador François Fillon y el izquierdista Jean-Luc Mélenchon, se mueven en una horquilla de menos de seis puntos en las encuestas, apenas por encima del margen de error, y con una tasa de indecisos muy elevada.

Esa situación tiene en vilo a los expertos demoscópicos que, además, se enfrentan a la irrupción de candidatos nuevos, como Macron, y otros con desconocidos índices de voto oculto. Por eso, aunque todos los sondeos colocan a Le Pen en cabeza de la primera vuelta (24%) y a Macron pisándole los talones (23%), la tendencia de esos dos candidatos es a la baja, al contrario de la que experimentan Fillon y Mélenchon. - L. Pascual