washington/bruselas - El Gobierno de Estados Unidos afirmó ayer que el objetivo del futuro tratado de libre comercio e inversiones (TTIP) entre Bruselas y Washington es “preservar, no socavar, nuestros robustos estándares de protección medioambientales y del consumidor”, al tiempo que rechazó la “errónea” interpretación de documentos filtrados por Greenpeace sobre una presión estadounidense. “Las interpretaciones dadas a estos textos parecen ser confusas en el mejor de los casos y directamente erróneas en el peor”, indicó un portavoz de la Oficina del Representante de Comercio Exterior de EEUU (USTR) en un comunicado.
La misma fuente subrayó que el TTIP busca “preservar, no socavar, nuestros robustos estándares de protección medioambientales y de protección del consumidor” y “situar a Estados Unidos y la UE en una posición conjunta para elevarlos aún más en todo el mundo”.
La oficina de la USTR, cuyo titular, Michael Froman, dirige las negociaciones sobre el TTIP por parte de EEUU, se refirió así la filtración por parte de Greenpeace Holanda de documentos de la negociación que muestran por primera vez las posiciones de Washington en diferentes áreas y sus intentos para que la UE se adapte a sus demandas. Los documentos fueron filtrados por la organización ecologista, que se opone al acuerdo comercial, y que ha pedido detener las conversaciones hasta que no haya un “debate público” sobre la base de “hechos y no especulaciones”.
El pasado viernes delegaciones de ambas partes cerraron en Nueva York con avances una nueva ronda de negociaciones sobre ese futuro acuerdo de libre comercio e inversiones y siguen viendo posible completar el proceso este año. - Efe